domingo, 1 de abril de 2007

Primer diálogo

Miércoles, 15 de enero de 2003.


Te estás riendo, veo que te gustó la carta.

---Cuatro Horas... Me gusta.

---¿Sólo el apodo o también la carta?

---También la carta. Supo ponerle su sazón.

---Hablas como una excelente cocinera.

---Lo soy. Pero dígame: ¿Por qué, si ha recibido tantas críticas por la palabra "pedo" la sigue poniendo?

---Por justicia poética.

---No entiendo. ¿Por qué justicia? ¿Y por qué poética?

---Mira Cuatrohoras, es de estricta justicia que dos de los más grandes mitos de la historia del pensamiento humano, y los más degradantes como son el materialismo y la reencarnación sean aplastados. ¿Y que mejor que para ello baste y sobre con algo tan ligero y despreciable para todos como un pedo?

---No veo como hayan quedado aplastados. Y tampoco creo que Birla ande abestiando, y menos aún insectando a sus amigos.

---¿Qué no? Mira Cuatrohoras, por primer vez me encontré con una chica diciéndole 'buey' a otra, y fue casi frente a tu restorancito. Y no una, dos veces se lo repitió mientras me acercaba caminando. Antes, por la simpatía del mexicano nos trataban en la hispanidad de manitos. Así, de manito, contracción de hermanito nos tratábamos. Ahora me temo que nos dirán los 'güeyes'...

---¡Ya me imagino lo que les habrá dicho!

---Lo obvio, "señoritas, una mujer jamás debe decirle buey a otra"... "Le debe decir ¡vaca!" La carcajada de una de ellas fue de recordarse. Lo preocupante fue la cara de las otras dos, como diciendo: 'no sé cual sea la diferencia'.

---Mira amigo, la simpatía del mexicano existe aún. El otro día un taxista al pasar frente a un colega chocado le grito: "Tantos años de andar de araña, ¿y caerte de la pader? Así 'pader', ¡pero no sentí que lo estuviera insectando!

---Pero Cuatrohoras, no hay relación alguna entre ser cantinflesco y ser transmigracionista.

---Ya sé lo que voy a hacer, voy a bautizar a mi hijo.

---¿Habrás dejado de ser atea, Cuatrohoras? ¿Y cómo le piensas poner?

---¡Jitomate Tigre Catorce!

---¿Estás bromeando pequeña?

---¿Acaso no son ustedes los de un Papa León Trece? Además, insisto en que ¡no veo como hayan quedado aplastados!

---Quedan aplastados siempre y cuando coloques la palabra pedo en la frase: "No es lo mismo expirar el alma que echarse un pedo".

---Pues todavía no entiendo...¡Y menos lo poético del pedo!

---Mira pequeña, lo poético radica en que los errores agigantados por la soberbia de tantos puedan ser aplastados por algo tan leve, y en que tanta presunción pueda serlo por algo tan despreciable.

---Pero todavía no veo que hayan sido aplastados, yo sigo sin creer en el alma, y le aseguró que mi amiga Birla seguiría creyendo en la reencarnación.

---El asunto es muy sencillo: ¿Cómo le llamarías tú a la mayor parte que fue lo que partió?

---Ya veo, si usted le llama alma entonces el alma existe ¿Y si quisiera ponerle otro nombre?

---¿Cuál te gustaría?

--- No se, cualquier otro.

---Simplemente nadie te entendería, pero con la palabra alma te entenderíamos todos. Para que te quede más claro, esa es la función de las palabras, que podamos entendernos.
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---Pues para que podamos entendernos, tu, que dices que las máquinas núnca podrán pensar, ah, ¡pero que bien juegan ajedrez!
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---¡Las computadoras no juegan ajedrez!
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---Claro que sí, ¡todo mundo lo sabe!
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---Lo que quieres decir, es que cualquiera puede jugar ajedrez usando, repito, usando una computadora.
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---No veo la diferencia. Si la que lo hace todo es la computadora.
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---La diferencia está en el sujeto que realiza la acción. Tu juegas, no la computadora. Tu piensas, no la computadora. Tu conectas el enchufe a la pared y la prendes. La computadora carece de la autonomía de la persona por no ser persona. Carece de inteligencia y de voluntad. La computadora como el automóvil fue querida y pensada, no se creó sola, menos aún el universo. El programa para jugar ajedrez, es fruto de otro, de un programador con la autonomía de su inteligencia y el querer, igualmente autónomo, de su voluntad. Unos han venido plasmando su inteligencia en las distintas partes del cacharro 'computadora' u 'ordenador'. Otros en programas, y los usuarios en lo que les es propio, el uso. No difieren estos ingenios modernos de los antiguos, la diferencia está en la tontera moderna acostumbrada a 'que le digan' y perezosa cual ninguna para pensar individualmente. Los bisabuelos jamás tontearon hablando de que el cincel de Miguel Ángel o el piano de Beethoven tuvieran genio y lo hicieran todo, y La Pietá y la Novena Sinfonía están perfeccionadas a un grado de terminado que la computadora dista mucho de alcanzar.
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---Pues tu dirás lo que quieras, pero si hago una jugada, la computadora me responde con otra.
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---La computadora...¿o el programa?
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---No veo la diferencia.
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---Así se arman las confusiones. Quita el programa, ¿y cómo te responde la computadora?
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---No podría ni iniciar la primera jugada. Pero ¿qué puede hacer el programa sin la computadora?
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---¡Muy bien, Cuatrohoras! Fíjate en lo mucho que hemos progresado. El cacharro tiene la estructura, pero requiere de electricidad que lo anime. Ya conectada, pero sin el programa, ni teniendo el hardware más evolucionado puede hacer algo. Es el programa el que termina de animarla.
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---Pero si animarla viene de anima, que significa alma.
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---Exactamente, Cuatrohoras. El programador es el que contesta a tus jugadas por medio de su programa. Y su programa, requiere de la computadora como Cervantes requirió de la imprenta. Puedes creerme que el espíritu de Cervantes está en el Quijote como el de Beethoven está en su obra. Pero a nadie se le ocurrió jamás que la imprenta llegara a pensar algún día, ¡a pesar del genio de todo el Siglo de Oro en libros bien impresos! La tecnología evoluciona, los medios se vuelven más sorprendentes, pero solo las personas piensan.
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---Mira amigo, yo no voy a dar mi brazo a torcer tan fácilmente. ¿Qué más hay en el alma para que podamos reconocerla?

---Todo lo que hay en las personas una vez que restamos sus cadáveres.

---Eso no me agrada, yo preferiría que dijera que restamos sus cuerpos.

---No es posible pequeña, ya que los cuerpos vivos están animados. Todas las características y actos corresponden a la unidad del alma con el cuerpo. La única forma de detectar el alma aislada es por la separación de su cuerpo, valorando lo que la persona era en vida en relación con lo que quedó de ella en sus despojos mortales. Ese es el problema de contabilidad al que me refería en mi carta. Para que puedas entenderlo mejor piensa en lo mucho que tiene que gastar la NASA para poner a cada astronauta en órbita, y en lo difícil que es. ¿Te das cuenta del problema que sería irse al cielo cargando tanto peso con nosotros?

---Y para dar mayor validez al hecho de que se va la mayor parte, hacías referencia a los ritos primitivos de llevar de comer a los muertos.

---Así es, cualquier indio moderno por primitivo que lo veas, al igual que sus ancestros más remotos es mejor contador y más sabio que los falsos intelectuales modernos, tan petulantes como necios, dados a exponer doctrinas materialistas y supuestas reencarnaciones.

---Todavía habrá que ver que dice Birla.

---No se te olvide darle copia de la carta.

---Me quedaré pensando... Pero dime una cosa más: Cuando se muere un gusano ¿también su alma se va al cielo?

---Te me quedas en la cocina pequeña, de contabilidad no asimilas nada. Prueba de ello es la ínfima diferencia entre el gusano muerto y el gusano vivo cuando la comparamos con la enorme diferencia entre una persona muerta y la misma persona viva. Es precisamente la diferencia inconmensurable entre el alma animal y el alma racional la que exige para esta última el premio eterno de la Gloria o el castigo eterno del Infierno. ¿Has visto alguna vez un gusano con problemas de conciencia? ¿A un gusano arrepentido? ¡Porque entonces habría que poner eso en la balanza de tu contabilidad!
El hombre conoce la diferencia entre el bien y el mal y elige libremente, de esta manera se autogobierna, se asemeja a Dios para su salvación, o se abestia y endiabla para su condenación. El animal, por el contrario, gobernado por el instinto, no entiende nada, de nada.

---¿Entonces en el entender está la diferencia entre el alma humana y la animal?

---Las diferencias lo dicen todo.

---Lo voy a pensar...
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Segunda carta a la pequeña Ale Cuatro Horas.


Viernes, 17 de enero de 2003

Querida Cuatrohoras:

Quisiera ahora platicarte un poco de nuestro Padre Eterno que sólo desea tu felicidad. De ese Padre de cuyo conocimiento te has perdido durante tanto tiempo.

Tengo que comenzar por confesarte mis limitaciones. Hablar de Dios con verdadero conocimiento es algo que está tan solo al alcance de los grandes santos ―y más concretamente de los grandes místicos― y de los astrónomos. Si, curiosamente son los astrónomos los que pueden darte una idea muy apropiada sobre la grandeza de Dios, como los grandes místicos católicos te pueden dar la idea más correcta del amor de Dios.

Son los astrónomos, y muy principalmente los de nuestros días con sus telescopios último modelo los que alcanzan a ver la grandeza de su obra. Al universo visible en su conjunto. Un universo compuesto por cientos de miles de millones de galaxias que son verdaderos universos islas, compuesta cada una de cientos de miles de millones de estrellas.

¿Tienes idea, pequeña Ale Cuatrohoras, de lo que significan estos números? Para hacernos una idea ¿qué te parece si comenzamos a contar hasta 100 mil millones? Uno, dos, tres... para ahorrar tiempo vamos a asignar un segundo a cada número, lo que significa contar sumamente rápido, ya que conforme avanzas hasta números como 37 587 435 496 (treinta y siete mil quinientos ochenta y siete millones cuatrocientos treinta y cinco mil cuatrocientos noventa y seis) se lleva bastante más de un segundo. Además del cansancio.

Siguen dos párrafos de cálculos aburridos
Pero se facilita un cálculo muy rápido ya que tenemos 60 segundos por cada minuto, 60 minutos por cada hora, 24 horas por cada día, y 365 días por cada año. Lo único que tenemos que hacer es multiplicar 60 X 60 X 24 X 365 = 31,536,000 segundos en un año. Si dividimos 100,000,000,000 entre ese número de segundos tenemos 3571 años, contando a número por segundo, ¡y sin dormir! ) De esta manera te podrás dar una idea de lo que representa una cifra tan grande como cien mil millones.

Habiendo contado las estrellas de una sola galaxia ya sólo tendrías que multiplicar ese número en años por otros 3171 años más sin dormir (Hay unos 100 mil millones de Galaxias) para tener el tiempo en años requerido para contar el número de estrellas que hay en el universo. Lo que te dejaría, sin dormir, 10,055,241 años. Faltándonos vida y ganas para contar siquiera hasta la 100ª parte de una galaxia, para nada nos vamos a animar a calcular el número de planetas que pudiera haber. ¿Qué te parece? ¡Y eso que no hicimos el ajuste de segundos requeridos para contar números excesivamente grandes! Lo que bien podría significar un aumento de diez veces esa cifra. En resumen: Redujimos, y haciendo trampa, cifras astronómicas a un contar en años para quedarnos con cifras que siguen rebasando nuestra capacidad de comprensión. ¿Aprecias por lo menos un poco cuanto más grande es Dios que la humanidad entera?

Y continuamos...
Pero aquí va lo sorprendente: el universo no anda en ferrocarril sobre unas vías haciendo de cada instante un trayecto sobre el que se mueve un poco, movilizando el universo gigantesco. Si así fuera las máquinas del tiempo serían factibles. No lo son, porque el universo existe solamente como HOY, y curiosamente así lo dice la Sagrada Escritura al referirse al Verbo Eterno del Padre y a la existencia divina como un eterno presente: "Tú eres mi Hijo, Yo te he engendrado Hoy". (Hebreos 1:5―5:5) ¡Que verdades tan profundas las de la Palabra de Dios!

¿Quién puede localizar el ayer para ir a comprar lo que subió de precio? ¿Quién el mañana para comprar con certeza el gordo de la lotería?

Solo existe el hoy, y como instante.

El universo entero existe sólo instante tras instante en su perfecta economía. El pasado ya no existe, y el futuro no ha llegado. Las máquinas del tiempo son imposibles: no podemos movernos hacia lo que ya no existe, mucho menos a lo que aún no sólo no existe, sino que hasta pudiera no llegar a existir.

Y Faltándonos vías, carreteras, y cualquier forma de sustento para transportes como el aire o el agua para viajar por el tiempo, ¿para qué hacernos tontos mencionando máquinas o vehículos de transporte para viajar en él? Si no tenemos el medio ¿cómo iniciar el diseño del transporte? O sea que, ni por lugar al cual llegar por inexistencia del mismo, ni por medio de sustentación para hacerlo factible, ni de transporte al no poder siquiera imaginar su diseño.

Ante el absurdo total de los viajes al pasado y al futuro somos llevados, de nuevo, a maravillarnos en Dios, el Señor del Tiempo.
Mucho más perspicaces que los imaginativos novelistas de ciencia ficción, los antiguos griegos ya hasta nombre le habían dado: Cronos. Si, los pueblos antiguos nunca fueron tan tontos como para creerlo máquina, lo imaginaron dios.

¡Qué importante es entender el tiempo!

Esto es lo asombroso del asunto: la fuerza y sabiduría de Dios, omnipotente e infinita, está de hecho recreando en la Persona del Hijo el universo entero a cada instante dándonos a todos la idea de continuidad. Es en el Apocalipsis donde Jesucristo se señala a Sí mismo como la omnipotencia que sostiene el tiempo mismo en movimiento: Yo Soy el Alfa y el Omega, el principio y el fin (Apoc. 1:8―21:6―22:13). Para entender esto, pequeña Ale Cuatro Horas, debes recordar que Alfa y Omega en el alfabeto griego son el equivalente a nuestra A y a nuestra Z, las letras que enmarcan nuestro alfabeto.

Y esta ---la existencia única del instante--- es la más perfecta y mayor prueba de su existir. No existiendo el pasado como un lugar, ni el futuro como tal, las vías tampoco existen para trasladar el universo de un instante a otro. Hay una creación a cada instante del total del universo. El existir de Dios, por tanto, es un existir distinto a como existen las cosas; Dios no Existe como existes tu o como existo yo, sino de manera esencialmente distinta, autónoma, existiendo nosotros con una existencia meramente participativa de la suya. En otras palabras: el único que existe en Sí mismo es Él, haciéndonos partícipes de su existencia. ¿Asombroso? Trata de darle la vuelta. ¡No hay forma!

Veamos en donde muchos han incurrido en error diciendo: demuéstrame que Dios existe, a lo que filósofos despistados han conducido por no saber analizar la palabra existir antes de adentrarse en ella. La única respuesta posible viene siendo muy divertida: demuéstrame que existes tú. ¿En dónde estabas tú, pequeña Ale Cuatro horas, hace tan solo 35 años? ¿Y tú le llamas a eso existir? ¿En dónde estarás dentro de 100 años? ¿Y tú le llamas a eso existir? ¿Puedes empeñar tu palabra, pequeña Ale Cuatro Horas, de que estarás con vida dentro de medio minuto? ¿Y tú le llamas a eso existir? Como verás el problema con la palabra existir es que hay de existencias a existencias. No es que seas una inexistente completa, obviamente, sino que ni todo el género humano ha dejado de tener principio, ni en su forma actual dejará de tener fin, ¡mucho menos será capaz de añadir una sola estrella a los cielos! ¿Ves cuán grande es Dios?

Lo impresionante pequeña Ale Cuatrohoras, es el amor que impulsó a nuestro Padre a crear todo este universo para que la pequeña Ale Cuatrohoras pudiera llegar a existir para conocerle y amarle. Dios ama con un solo amor, y ese amor es tan grande como Él, es decir, infinito. Pero nunca olvides, pequeña Ale Cuatro Horas que amor con amor se paga. Lo que nos deja frente a un enorme problema y un enorme misterio. ¿Quién puede amar a Dios con un amor proporcionado a su amor infinito? Si amor con amor se paga estaríamos ante una deuda impagable. Ah, pero Dios mismo fue la solución; y Él mismo pagó la porción infinita de tal deuda. Lo que nos conduce al misterio de la naturaleza divina que jamás se nos hubiera ocurrido de no habérsenos revelado: La Santísima Trinidad. Gracias a este misterio, y al adicional de la Encarnación del Verbo eterno del Padre, apreciamos como Dios Hijo toma una naturaleza humana para amar a su Padre como Hombre-Dios con su mismo amor infinito. Y la manifestación de ese amor total, perfecto, y a la vez reparador, constatable históricamente fue el Sacrificio del Calvario: la Cruz.

Que fácil será para ti, pequeña Ale Cuatrohoras, entender como se enlazan el amor y el sacrificio por la forma en que te has sacrificado para sacar adelante a tu hijo. Como verás, has sido una católica muy practicante en lo esencial aunque te falte preparación, ya que para nosotros los católicos lo despreciable, lo repugnante no es el dolor, sino la falta de amor.

Para introducirnos en éste Misterio de la Santísima Trinidad y su necesidad para entender el origen de todas las cosas, imagínate la Cámara de Diputados con sus 500 miembros. Se presenta un sabio y pronuncia un discurso de tal elevación y grandeza que los pobres diputados alcanzan a entender tan solo un quinientosavo cada uno. Aunque entre los 500 pudiera llegar a entender la totalidad del discurso ¿Qué diríamos? ¡Qué desperdicio de discurso! Así ocurre con Dios y todas sus criaturas por perfectas que sean. ¿De qué sirve pequeña Ale Cuatrohoras que haya alguien capaz de comunicar una riqueza infinita si no hubiera alguien capaz de recibirla? ¡Qué falta de proporción, simetría, y belleza! Si en Dios hubiera la menor imperfección, o faltara cualquier cosa Dios no podría existir, y tampoco podría existir cosa alguna. En otras palabras: la exigencia del ser en Sí se concreta a la perfección infinita. Es el Misterio Trinitario por el cual El Padre engendra a su Hijo consubstancial a Él y por consiguiente infinito y capaz de recibir la infinitud del Padre, quien con su amor igualmente infinito a su Padre nos habla de lo que tanto anhelábamos encontrar: la perfecta simetría, proporcionalidad y belleza infinita del único Dios.

Solo así en la Trinidad de las Personas se manifiesta la perfección propia de Dios completando el sentido mismo de la palabra existir, pero esta vez Existir con mayúscula. Solución al más grande de todos los misterios, el Misterio de la existencia, el misterio de que pueda existir cualquier cosa desde la más grande hasta la más insignificante. El misterio del porque hay algo y no nada.

Sobre todo, pequeña Ale Cuatrohoras, de la existencia de un universo monumental en su existir, en la belleza de su existir, y en las perfecciones de su orden.

Velo también de esta otra manera: ¿Por qué no hay hombres del tamaño de una ballena? La sencillísima respuesta es porque no hay padres capaces de engendrarlo de ese tamaño. Como verás el origen de las limitaciones está en los orígenes mismos. En otras palabras no hay limitaciones sin orígenes. ¿Qué ocurriría con las limitaciones cuando hablamos de un ser que no tuviera orígenes? Pues obviamente tampoco tendría limitaciones, puesto que lo primero que éstas exigen tener es un origen. Por este tipo de razonamiento nos damos cuenta de que el mismo movimiento en todo lo creado tiene que tener como principio un motor que no sea movido por otro, primer razonamiento de Aristóteles para concluir en la existencia de Dios. Si Dios requiriera de alguien que lo engendrara ya no sería Dios de quien estamos hablando. Este tipo de razonamientos son tan precisos como la suma de dos más dos arrojando cuatro.

Esta carta queda, por razones obvias, inconclusa. El tema es inagotable. Pero quiero dejarte una fuerte inquietud: Tanto amor como has recibido... ¿No te obliga conforme al primer mandamiento de Su Ley a amarle por encima de toda las cosas? Que Dios te bendiga pequeña Ale Cuatrohoras con un inmenso amor por Él.

Tu amigo viejo queda, con el cariño de siempre...
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Segundo diálogo con la Pequeña Ale Cuatrohoras.

¿Qué te pareció mi segunda carta, pequeña Ale Cuatrohoras?

---Me encantó por qué habla mucho del amor. Pero se me dificulta mucho creerlo, si Dios es amor y sostiene todo en la existencia ¿Por qué hay tan poco amor en el mundo?

---Yo no te veo tan falta de amor, pequeña Ale Cuatrohoras. Yo diría que por el contrario, tu desbordas en amor y lo comunicas a todos. Eso te señala de manera muy especial como alguien que está muy cerca y muy llena de Dios.

---Pero yo no creo en Dios amigo.

---Pero Dios no sólo cree en ti, sino que te llena de su amor. Me llena de ilusión el sólo imaginar tu felicidad en el momento en que te encuentres con Él.

---Tampoco veo como alguien pueda sostener un universo tan gigantesco en la existencia. Además yo sólo creo en lo que veo y en lo que puedo entender.

---Pequeña, la sola palabra creer se refiere a lo que no podemos ver. Lo que estás viendo ya no necesitas creerlo, y en cuanto a la existencia de las cosas, aún tratándose de las más insignificantes como pudiera ser una mosca, si para poder existir tuviera primero que pasar por la aprobación de nuestras muy modestas entendederas, puedes tener la más absoluta certeza ¡de que no existiría nada de cuanto existe!

---Pero también hay mucha falta de amor. Además, ¿por qué insistes en llamarme pequeña?

---Por lo ya dicho. Y porque también lo eres. Además te ves muy jovencita, casi tanto como tu hijo.

---Pero no me has respondido a lo de la falta de amor.

---La razón es muy sencilla, pequeña. Los hombres somos especialistas en echar a perder el amor. Lo ignoramos, lo maltratamos, lo abestiamos sexualmente, lo matamos con nuestra soberbia, lo aplastamos con nuestros egoísmos, y lo ridiculizamos ante aquellos que nos aman con nuestras continuas degradaciones y faltas de educación. En resumen porque no sabemos ni de lo que se trata. Ve simplemente de qué manera fue agredido el amor cuando se encarnó en Jesucristo y la forma en que es agredido el cristianismo, sobre todo cuando es traicionado por los cristianos.

---¿Entonces usted nos echa toda la culpa a los humanos?

---¡Pero por supuesto Cuatrohoras! ¿A quién más?

---¿Y porque tenemos la culpa?

---Por negarnos a creer en el amor. Ve tu propio caso, no creer en Dios es no creer en el amor porque solo Dios es bueno y solo Dios es amor.

---¡Eso sí que no! Yo conozco mucha gente buena, ¡y además usted me acaba de decir que estoy llena de amor!

---Si Cuatrohoras, pero una cosa es estar lleno de amor y otra muy distinta SER el amor. En cuanto a conocer mucha gente buena yo te garantizo para comenzar que yo no soy bueno, y que decir lo contrario me haría un hipócrita o bien un desconocedor de mí mismo. Y creo que cualquier persona honrada te dirá lo mismo en la medida en que lo sea. No basta por tanto con ser honrado para ser bueno. Para ser bueno, para no decepcionar, requeriríamos estar tan llenos de Dios como sus grandes santos... y aún así solo Dios es Dios. Como verás, pequeña Ale Cuatro Horas, resulta muy triste no conocer a Dios. Pero Dios no es una idea, sino que por el contrario, el que conoce el amor ya conoce a Dios. Hablaremos mucho de esto pequeña, porque la falta de discernimiento ha conducido a muchos a degradar el amor en sexo, a degradarse de esta manera degradando la imagen y semejanza de Dios en que fuimos creados para el amor.

---Todavía no entiendo como alguien pueda sostener un universo tan grande en la existencia.

---¿Qué entiendes por “alguien”, pequeña Ale Cuatrohoras? ¿Alguien como tu y yo? ¡Eso sí que sería imposible! Las diferencias son la base de la comprensión. ¡Sólo Dios es Dios!
Por lo demás, no queda de otra. Si sólo existe el hoy con su orden espléndido ¿sobre qué vías se sostiene para viajar entre ayer y mañana? Si el HOY es todo lo que existe, sólo existe un pequeño tramo de “vía”, por así decirlo, y que en resumen de cuentas se reduce igualmente al HOY. Por tanto no hay ni vías. Sólo el HOY. ¿Quién da continuidad y sentido a lo que llamamos tiempo?

---Pero eso ha sido siempre así, y nadie le ha visto nada de raro.

---Por supuesto pequeña, el tiempo mismo ha sido siempre un enorme misterio. Uno de los genios más grandes de todos los tiempos, san Agustín, decía en relación al tiempo: "Si nadie me pregunta que es, bien que lo se; pero cuando alguien me pregunta, entonces no se que contestar." Tienes toda razón en que siempre ha sido así, pero el problema no radica en que las cosas hayan sido siempre así, lo que es más, eso es lo que las hace más interesantes, el que hayan sido siempre así, porque eso ya amerita una pregunta adicional ¿por qué ha tenido que ser siempre así?

---Por el contrario amigo, yo creo que estás lleno de ideas anticuadas. Hay que ser modernos.

---Pero pequeña, date cuenta que nunca ha habido nadie que no fuera moderno. Lo necio es presumirlo, como si el presumirlo bastara para hacernos diferentes, y hasta mejores… Además... ¡Vaya imposible presunción! Caín, hijo directo de Adán era el más moderno de los hombres antes de que naciera su hermano Abel. Y así generación tras generación para quedar superados en modernidad por el próximo necio en nacer. ¿Qué puede valer eso? El solo hecho de presumir tamaña burrada nos deja marcados, por el contrario, como descocados. Somos menos cultos y preparados que dos generaciones atrás, cuando la gente tenía el sólido y menos contaminado marco de la cultura occidental cristiana.
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---Pero amigo, no nos referimos a la modernidad por un nacer después, sino por los adelantos. ¡Qué novedosa es la tecnología! ¿No te admira?
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---¡Por supuesto! Sobre todo las armas nucleares para la próxima guerra, los anticonceptivos y degradaciones...bueno, ¿qué no leíste el prólogo? La tecnología moderna sería una maravilla si los hombres hubieramos evolucionado a la par. Hasta ahora representan una juguetería maravillosa con una inmadurez igualmente asombrosa, y adelantos en la medicina con más plagas como el SIDA llevándole la delantera. No es que los adelantos no existan Cuatrohoras, sino que además de dejarnos más ayunos de humildad que nunca antes, nos acarrean llenos de soberbia a destrucciones sin precedente.
Y toda esa presunción de modernidad cae por tierra ante la mayor simpleza, cuando caemos en cuenta de que dos más dos suman necesariamente cuatro, de que así ha sido siempre, y de que nunca podrá cambiar, porque la verdad es así, perfecta, por inmutable. No por novedosa. Velo también en la belleza,¿Qué le ocurre con el paso de los años? Lo que varía no tiene consistencia ni tanto interés, porque lo que interesa es la verdad con su inagotable perfección. Desconfía, pequeña Ale Cuatro Horas de lo mudable, fíjate en lo inmutable y comienza a afianzarte en Dios y en la eternidad.

---Lo que quieres decirme amigo, es que debería presumir de conservadora porque la verdad es segura y no cambia, y la modernidad es insegura y dudosa. ¿No es así?

---Si, Cuatrohoras. Quedando, obviamente, mucho que decir al respecto.

---Pues a mi no me parece. Lo seguro me parece aburrido, además no habría progreso.

---¿Aburrido? ¿Progreso, Cuatrohoras? ¡No tienes idea de la divertida que se han puesto los hombres de ciencia que partiendo de, y repito: partiendo de; otra vez: partiendo de certezas para buscar nuevas certezas, alcanzan lo que tu llamas progreso! Y dije certezas bien ancladas en el pasado. No dije modernidades, ni mafufadas mal ancladas, o sea sin fundamento sólido.

---Mmm... Lo pensaré..




Tercera carta a la pequeña Ale Cuatrohoras.




Viernes, 24 de enero de 2003


Linda Cuatrohoras:


Eres muy inteligente pequeña Ale Cuatrohoras. Pero todo lo que vas asimilando tan fácilmente ha sido, históricamente, verdaderos rompecabezas para muchos por no decir que para todos; y para la mayoría lo siguen siendo. Lo importante es lo bien que vamos en el seguimiento de nuestro objetivo como me lo propuse: Preparar a la pequeña Ale Cuatrohoras tan rigurosamente que nadie fuera de ella misma pueda llegar a engañarla. Porque verás, nadie puede tener un enemigo peor que sí mismo. ¡Si tan sólo esto fuera comprendido por la mayoría! Mira lo que ocurre a tu alrededor. ¿Quién es el mayor responsable de que el delincuente sea delincuente; el borracho, borracho; el drogado, drogado; y el fracasado, fracasado? ¿No somos nosotros mismos nuestros peores enemigos? ¿Quién podría sustituirnos en tan tremendo papel? ¿Quién más fuera de nosotros mismos podría hacernos justificadamente despreciables a los ojos de los demás y de nuestra propia conciencia, y hacernos despreciables hasta el extremo de justificar nuestra eterna condenación?


Fíjate como hemos procedido hasta ahora, ya que intentaré no perder la misma sencillez y precisión. Me dijiste una vez que no todos los problemas eran tan fáciles de resolver como el que dos más dos sumaran cuatro. Creo que pude demostrarte lo contrario en el primer escrito, al reducir a un problema de contabilidad elemental el hallar el alma con solo restar a la persona el ínfimo valor de su cadáver. No se requirió de más para finiquitar toda posibilidad de reencarnación o de trasmigración de las almas. En el segundo escrito procedí de manera similar restando al presente el pretérito en cuanto inexistente y el futuro en cuanto inexistente mayor para concluir que existe solo el HOY, --la forma más económica de todo existir-- y sacar la consecuencia de la Omnipotencia Divina siempre actuante en Su eterno presente. A esto ayudó la ridiculez nacida de la ciencia ficción de supuestas máquinas del tiempo imposibles de justificar siquiera en teoría.


Vamos a intentar lo mismo ahora con la llamada teoría de la evolución fijada en la mente de casi todos por la fuerza de la propaganda, y grave obstáculo para el desarrollo de la verdadera persona humana. La persona humana tiene una grandeza sin par para ser alcanzada en cuanto hijos de Dios. Esta es una realidad Cuatrohoras. Encontrarte a ti misma exige que seas realista, y no hay realidades más contrapuestas que el hallarte gloriosamente como hija de Dios, comparada con hallarte abestiada como hija de mono.


¿Qué otra cosa podría desear Dios, el Creador, sino la perfección de su propia obra? ¿En qué podría consistir esa perfección tratándose de nosotros sino en nuestra felicidad? De ahí el valor de sus mandamientos, de los sacramentos, para conformarnos a los modelos perfectos a la vez grandiosos y felicísimos, dignos de la vida eterna.


Ve cuantos engaños del mundo y cuanto dolor derivados de la rebeldía a sus mandamientos en las tragedias de la violencia, joterías, feticidios y drogadicciones. ¿Caer en ello habiendo sido invitados a la felicidad y plenitud de los hijos de Dios?


Y seremos verdaderos hijos de Dios viviendo el evangelio, cuando concluyamos sabiamente convencidos de que sólo Dios es bueno. Que sus mandamientos nos fueron dados sólo para nuestro bien. Que sólo de nuestra rebeldía para su cumplimiento proceden todos los males y todos los engaños. Todo esto lo trataremos hasta dejarlo resuelto, pero por ahora divirtámonos con las burradas de Carlos Darwin y sus compinches.


Nos vamos a divertir de manera muy sencilla por medio de un experimento mental: Imagínate que te acabas de comprar una bolsa, la cual, por supuesto, está totalmente vacía. Ahora metes en ella 10 billetes de $100 cada uno. Te voy a pedir, pequeña Ale Cuatrohoras, que saques de esa bolsa todos los pesos que hay en el mundo. ¿Que opinas de eso? Me ibas a decir que estoy tan loco como Darwin, o que soy parecidamente imbécil; pero a eso equivale, precisamente, la marihuanada de la evolución de las especies.


Para que quede más claro te voy a pedir que saques tan sólo 1001. ¿Que opinas? Me ibas a decir y con toda razón que no puede sacar $1001 de donde solo hay $1000. Puedes expresarlo de manera más contundente diciéndome que eso equivaldría a crear $1.00 de la nada, y tendrías toda la razón del mundo. ¿Pero qué pasaría si ahora volviendo a la cordura te pidiera que sacaras tan sólo $1000? Ahora sí me dirás estás hablando en serio. Pues así de ridículo es todo el asunto que gira alrededor de la evolución de las especies. Y sin embargo, casi todo mundo está engañado con ello.


Podrías también decirme y con toda razón que la evolución sería más fácil como retroceso, ya que después de todo, de lo más sale lo menos, pero de lo menos no puede salir lo más.


¿Cómo, me dirás, si se han salido con la suya hasta el punto en que todo mundo se lo ha creído? Con franqueza, pequeña Ale Cuatrohoras, eso es cierto sólo en parte, ya que Darwin fue refutado inmediatamente con argumentos aplastantemente válidos--aun para hoy-- y de inmediato.


Como sabrás pequeña Ale Cuatrohoras, Carlos Darwin escribió un libro titulado "Sobre el Origen de las Especies". Debes saber también que cuando los escritores sacamos un libro no nos limitamos a colocarlo en los estantes de las librerías para ver quién se interesa en llevarse a nuestro crío. Los libros requieren publicidad, y los escritores los presentamos al público con la publicidad debida. Cuando Darwin presentó su libro en Londres dio lugar a que los periodistas ingleses lo refutaran. La refutación sigue siendo válida hasta el día de hoy. Lo que es más, si no le llamaron imbécil es porque eso es de muy mala educación. Para cuando termine esta carta creo que no te quedará otra que clasificarlo entre los imbéciles por muy educada que seas, porque verás, lo que al día siguiente le dijeron los periodistas fue del más elemental sentido común.


"Lo que el señor Darwin parece haber olvidado, es que nosotros los ingleses somos un pueblo dedicado a mejorar razas de perros y de caballos, y a pesar de nuestra inteligencia que nadie pone en duda, nunca hemos podido lograr que un perro deje de ser sólo un perro, ni que un caballo deje de ser tan sólo un caballo".


¿Qué pero le pones pequeña Ale Cuatrohoras? Lo que estaban diciendo, concretamente, es que una cosa es la evolución (asunto perfectamente correcto y lógico) por medio del cual se pueden lograr nuevas razas de perros y de caballos, pero otra muy distinta es el transformismo que nos permitiría violar el principio fundamental que entendiste tan bien en el caso de porque no hay hombres del tamaño de una ballena: porque el origen de las imitaciones está en los orígenes mismos. Resumiendo: los perros sólo pueden tener perros; y los caballos, caballos. Si la especie perro da siempre lugar a individuos distintos, no hay razón para que no se puedan lograr razas distintas de perros, y no sólo distintas sino mejores. Pero que diferente resulta pretender que un perro pueda transformarse en algo más que un perro, por ejemplo en un caballo, o hasta en un caballo capaz de ladrar y atacar a los rateros, idea divertida que señala un hueco capaz de refutar al señor Darwin. El registro de los fósiles dice NO a Mr. Darwin. Pero como acabamos de ver en la divertidísima idea de un caballo-perro el registro de los vivos está de acuerdo con el registro de los fósiles. En otras palabras: Ni la especie perro ha podido desarrollarse más allá de sus limitaciones, ni tampoco ha podido la especie caballo, mucho menos han podido establecer un acuerdo para que el mito que se me acaba de ocurrir pudiera hallarse entre los seres vivos reales.


Queda por supuesto por examinar la idea de una evolución al revés ya que de lo más si sale lo menos. ¿Pero dónde vamos a encontrar la especie caballo-perro para ponerla en reversa para sacar perros por un lado y caballos por otro? Como esto no queda muy claro me permitirás que con mucha mayor lógica apele a Aquel que lo sabe todo, y afortunadamente hay un pre
cioso comunicado de Jesucristo N.S. a una mística Italiana llamada María Valtorta sobre este asunto. Le dijo:

"En relación con ese error que tanto daño ha causado, ve como con toda su inteligencia y tecnología no sólo no son capaces de hacer que un mono se convierta en hombre; sino que ni siquiera son capaces de dejar a un hombre convertido en mono. No importa cuánto lo mutilen, tendrán cuando mucho un hombre mutilado y embrutecido, pero jamás un mono, porque el mono TIENE SU PROPIA PERFECCIÓN".

Y es la perfección de las especies otro mentís rotundo a Mr. Darwin similares y conexos, mentís que constatamos por la falta de especies intermedias en el registro de los fósiles y en el registro de los vivos.


Todos los argumentos, todos los nuevos descubrimientos, el código genético, todo, absolutamente todo es contrario a la evolución que pudimos dejar por tierra sin necesidad de rebasar los argumentos contables. Sin tener que ir mucho más lejos de verdades tan sencillas y precisas como que 2 + 2 = 4.


Y esta vez con más sencillez al afirmar: de la nada, nada sale. Mucho menos todo, todas las especies perfectísimas como son.


Me dirás, y con razón, ¿qué objeto tiene meterse a refutar el evolucionismo de Carlos Darwin cuando sólo existe el HOY que impide considerar una continuidad sin Dios actuando, y de tal manera que no puede caer la hoja de un árbol sin su expresa voluntad? Obviamente que no era necesario. Nos basta con saber quién es Dios. Que sólo existe el HOY. Lo sorprendente y que deseo tratar en mis próximas cartas es el hecho de que toda la ciencia moderna nos habla hoy confirmando los dogmas de la Iglesia Católica. Debiendo hacer la aclaración que pocos, si alguno, ha caído en cuenta. Pero el hecho es real como próximamente podrás ver.


¿Cómo pudieron salirse con la suya hasta el día de hoy? ¿O no es eso lo que te viene a la mente?


Asombrosamente, pequeña Ale Cuatrohoras, salieron con el cuento de que, dado tiempo suficiente todo ello podría ocurrir. Lo que equivale a rebuznar dando un do de pecho. Porque dime, pequeña Ale Cuatrohoras, no habiendo un mecanismo capaz de sacar algo de la nada ¿qué habría pasado con los 10 billetes de $100 a través de los siglos?


Es muy obvio, pequeña, que independientemente de la inflación y demás accidentes previsibles los billetes iban a acabar deshaciéndose de viejos. El tiempo no sólo no mejora las posibilidades de que pueda pasar cualquier cosa, sino que restringe las cosas que pueden pasar a lo destructivo en total contraposición a lo constructivo que estos pobres infelices pretenden. El deterioro implacable sí es científico y en su forma mejor estudiada se le conoce como la segunda ley de la termodinámica.


¿En que quedó el evolucionismo de estos enemigos de Dios Creador? ¡En la nada! Pero que triste, pequeña Ale Cuatrohoras, que se pueda engañar con tanta facilidad a la gente, lo que sería imposible si la gente amara verdaderamente a Dios, amor que impediría que se dejaran engañar. ¿En dónde estuvo el meollo del asunto sino en nuestra falta de amor a Dios? Como hace un siglo observaba Chesterton "Muchos creen que el que no cree en Dios ya no fue capaz de creer en nada, lamentablemente es al revés, el que no cree en Dios ya estuvo que fue capaz de creer en cualquier cosa".


Y peor: el que no ama a Dios por encima de todas las cosas ya estuvo que fue capaz de amar cualquier cosa en lugar de Dios, lo que se conoce como idolatría. Como verás también la perfección de la inteligencia radica y se funda en el amor a Dios. No es que Dios nos quiera engañados, sino que su justicia que nos dio el más razonable de los mandamientos, su primer mandamiento "Amarás al señor tu Dios con toda tu alma, con toda tu mente, y con todo tu ser" le impide violentar su justicia para sacarnos del error así como así y sin más, ya que el verdadero error está en la falta de amor. La mayor lección de nuestras vidas es la más elemental de todas: ¡Amemos en justicia a Aquel a quién debemos todo!


Mira cuantos caminos de puro sentido común podrían haber apartado a la gente de error tan nefasto como el aportado para perdición de muchos, estultificación de sus vidas, pesimismo y falta de creatividad. Fallas que podríamos resumir diciendo "orientalización de sus almas" en el sentido que te señalé en mi primera carta: Teniendo el oriente las mayores reservas humanas es incomparablemente inferior al mundo cristiano en su creatividad. Y lo que es más, su nueva creatividad le está llegando de las tierras evangelizadas en forma de tecnología que ellos no han inventado sino cuando mucho están perfeccionando en algún sentido. Y éste es una de las grandes lecciones, quizá la más grande: El error es una limitante. El pecado es una limitante. No podemos entender los problemas actuales del hombre sin entender el pecado original como una limitante, la mayor de todas.


Tampoco podemos entender el evangelio sino como el rompimiento de todas las limitantes, con la fuerza de los sacramentos para evitar el pecado que nos embrutece. Estas son las palabras de Jesucristo N.S. al respecto: "No llaméis maestro a hombre alguno, porque uno solo es vuestro Maestro, el Mesías de Dios, y todos vosotros sois hermanos." (Mateo 23:8) La verdad de estas palabras las confirma la historia. Sin ese Maestro todo es confusión, limitación del intelecto y abestiamiento sexual.


No importa cuantos caminos de puro sentido común pudieran venir al caso, te debo a ti, pequeña Ale Cuatrohoras, el referirlo a tu pequeño restaurante. Lo que será divertido aunque ya resulte innecesario. Podrías, por ejemplo, pequeña, tratar de sacarle la vuelta al asunto diciéndome que el dinero si es capaz de producir más dinero, en lo que tendrías razón, V.g.: en tu pequeño negocio, en el banco, o en la Bolsa de Valores. Pero si te fijas bien, aquí estamos hablando de un mecanismo operando en un sistema abierto. Si, abierto a la integración de elementos externos como el trabajo, el capital, la tecnología y todo esto bajo el genio empresarial; ya sea el tuyo, o el de otros, y no de un mecanismo cerrado; y más que cerrado, encerrado en la propia especie.


Repito la palabra mecanismo porque ha vendido siendo muy importante en los debates sobre la evolución. Ni Darwin, ni los darvinistas, ni los neodarvinistas han sido capaces jamás de aportar no digamos ya el más leve indicio, sino la más leve evidencia válida sobre un mecanismo válido del tipo que en este caso representan las actividades empresariales capaces de operar en un sistema abierto y que fuera capaz, por consiguiente, de justificar las burradas de Mr. Darwin como algo más que meras burradas.


Pero de nada nos sirve pequeña Ale Cuatrohoras refutar todos los errores y aprender todas las ciencias si no progresamos en el amor a Dios. Solo Dios es bueno, nos dice Jesucristo N.S. en el evangelio. ¡Si tan sólo le creyéramos! Te decía arriba: ¿Quién podría sustituirnos en tan tremendo papel autodestructor como el que se desprende de negar que sólo Dios es bueno? ¿Quién es en última instancia el más responsable de que vivamos en el error? ¡El que se equivoca pierde! Por tanto, quiero dedicar esta carta a Nuestro Padre Amantísimo, el único bueno, y el único veraz para beneficio de esta pequeña hija que Él quiere tanto. Hay muchos errores que los enemigos de Dios y de sí mismos, engañados, y en el tremendo papel de ser sus peores enemigos han difundido obstaculizando el conocimiento y amor a Dios. ¿Y qué error más grave que negar la bondad del Creador de todas las cosas que sólo quiere la perfección de sus criaturas?


¿Qué podría ganar Dios echando a perder su obra? ¿Lo que no hace un necio lo iba a hacer la inteligencia infinita? Lo que no hace un ignorante ¿lo iba a hacer la sabiduría infinita? Lo que no entiende la gente, porque a Dios le pedimos, le exigimos, y algunos hasta pretenden darle consejos; es que Dios tiene un punto de vista propio, que precisamente por ser infinitamente superior al nuestro sigue siendo el Suyo propio. Estamos muy abiertos a escuchar el punto de vista de los demás, pero cuando de Dios se trata ¿Quién se pone a pensar en sus problemas? Todo mundo parte del hecho de que Dios, por ser omnisapiente, y omnipotente, no puede tener problemas. Obviamente, Dios es esencialmente distinto a nosotros por ser la existencia misma y por su infinita perfección. Obviamente que sus problemas están resueltos, pero, ¿significa eso que lo entendamos, o que no tenga problemas?


Considera por un momento el problema que Dios se planteó a Sí mismo con la creación de los seres libres: los ángeles y los hombres. Problemas que todo Padre tiene con el libre albedrío de sus hijos. El problema de que les salga un mal hijo; y no solo malo, sino hasta parricida. Porque verás, pequeña Ale Cuatrohoras, aquí no estamos especulando, sino hablando de realidades de historicidad perfecta como el Calvario. En el siglo XIX hubo un movimiento filosófico que pretendía que Dios había muerto. No hubo nadie que se levantara y proclamara que hasta en eso había querido darnos gusto, que en efecto, murió. ¡Pero que al tercer día resucitó! Con la marca de Caín se marcaron los judíos, su pueblo elegido. El drama no pudo ser mayor. Mejor dicho, no podría concebirse drama y tragedia mayor que éste que fue para nuestro bien. Lo que los judíos perdieron nosotros lo ganamos.

Es muy obvio, pequeña Ale Cuatrohoras, que Dios encarnado en María sólo podía morir en su naturaleza humana y no en la divina. Pero fíjate hasta qué punto nos han engañado a la mayoría de la humanidad con la negación de Dios hasta en su papel de Creador, pasó indispensable para luego negar su papel como Redentor.


¡Cuanta tristeza sin Dios! ¿De donde una verdadera esperanza sin Dios? ¿Cómo podría haber justicia sin Dios? ¿Cómo podría haber misericordia sin Jesucristo? ¿Cómo quiso nacer Jesucristo sino de la Virgen María? ¿Cómo completar el amor del Padre que nos dio madres humanas sin representarse Él mismo con el Corazón de Madre de María? La catolicidad es lo único completo en sus perfecciones.


Lo incompleto carece de plenitud existencial, de permanencia. Jamás habrás visto a alguien sin cabeza por la calle. Tampoco puede haber un Dios verdadero Padre que no fuera capaz de darnos una Madre, así, con mayúscula, como quiso Dios darnos a la santísima Virgen María, nueva y mayor razón para amarle. La riqueza de la fe católica a diferencia de las demás doctrinas capaces de afirmar: "Demasiado bueno para ser cierto", afirma por el contrario: "Demasiado bueno ¡para no ser cierto! Demasiado completo y puro ¡para no ser real!"


Sin más por el momento quedo de ti, con el cariño de siempre...





Tercer diálogo con la pequeña Ale Cuatrohoras




¿Te interesó mi carta sobre la evolución, pequeña Ale Cuatrohoras ?


---Mira amigo, la carta me gustó mucho pero todas esas razones van contra la corriente. ¿De verdad quieres que te crea que nos han engañado a todos? ¿Será posible engañar al mundo con tanta facilidad?


---Mira pequeña, engañar al mundo entero es posible cuando un solo grupo se adueña de los medios de difusión mundiales. La prensa, la radio, el cine, la televisión, los partidos políticos y la banca mundial se encuentran integrados bajo un solo mando. Y para que se cumplieran las profecías sobre el reinado del Anticristo los partidarios del Diablo han obrado con mucha habilidad, mientras que los partidarios de Dios carecen hoy de dirigentes. Como dice la Sagrada Escritura "Ay de los pastores".


---¿Pero cómo, qué no hay quien dé la voz de alarma?


---Como alerta el evangelio, los hijos de las tinieblas son más astutos que los hijos de la luz. Debes saber pequeña Ale Cuatrohoras, que los pueblos del mundo cayeron bajo las fuerzas revolucionarias por que pocos quisieron denunciar a los culpables, los cuales se hallaban bien camuflados pero tendrán que salir a luz y dar la cara para la batalla final de la historia. El problema es que no la van a dar por lo que realmente son, rabinos judíos, hasta no acabar primero con el clero católico.


---¿Pero que tienen que ver el clero y los judíos en este asunto?


---Es muy sencillo Cuatrohoras, uno de los dos grupos está de sobra y todo gira alrededor de la mesianidad y divinidad de Jesucristo; lo que tú comprenderás no da lugar a términos medios, ya que Jesucristo o es el Mesías de Israel o no lo es, punto. De igual manera, o bien Jesucristo es Dios o no lo es, punto. Como verás no hay lugar a términos medios, ni a andarse con tibiezas.


---Pero yo no acabo de entender que tiene que ver todo eso con las teorías de Darwin.


---Es muy sencillo, el rabinato judío ha tenido que ir compensando su aplastante derrota milenaria en los últimos cuatro siglos. Para que entiendas, los únicos que les creían a los rabinos eran los pobres judíos. El rabinato sufrió la más aplastante derrota con la resurrección del Señor. Imagínate la escena: las autoridades del Templo tomaron todas las medidas para acabar con su contrincante, Jesucristo N.S. que los exponía públicamente por lo que eran: raza de víboras, sepulcros blanqueados, hijos del Diablo. Eso lo encuentras todo en los evangelios. Para asegurarse ellos mismos de que no se trataba de Dios a pesar de los milagros sorprendentes que hacía, y para quitarles de la cabeza a los judíos que se trataba del mismo Dios como Él lo afirmaba, lo condenaron a la muerte más degradante y dolorosa concebible. Haberlo logrado fue un triunfo aplastante y aparentemente sin remedio. Podemos decir que el movimiento mesiánico encabezado por el Hijo de Dios había quedado totalmente liquidado a los ojos del pueblo judío. Entonces vino el giro de poder más sorprendente y milagroso de la historia, al grado que todo lo que tramaron y realizaron se les volteó. Como se dice vulgarmente: El tiro les salió por la culata. A mayor tormento y más público mayor certeza de su muerte, y preparación consiguiente a la prueba de su resurrección. A mayor aplastamiento del movimiento mesiánico, a mayor publicidad del mismo, menos creíble que a sus pobres apóstoles, meros pescadores traicionados junto con Cristo por Judas Iscariote quien lo vendió a la sinagoga les quedaran las menores ganas, no se diga ya de emprender algo por su cuenta, sino como mínimo de levantar la cabeza o de permanecer unidos. Como podrás ver el tiro no sólo les salió por la culata, sino que el desarrollo y fuerza de todo el occidente cristiano fundado en la iglesia de Jesucristo como Dios verdadero y Mesías de Israel es un testimonio del giro de poder más aplastante de todos los tiempos, fundado, en lo único capaz de hacerlo posible: Su resurrección. Certeza de que las puertas del Infierno ---entiéndase por esto el rabinato judío--- no podrán prevalecer como tampoco pudieron hacerlo en el Calvario. Esto te quedará claro cuando entiendas que el cristianismo fue la liquidación del judaísmo desde el principio, lo que ha obligado a los zorros astutos del rabinato a emplear todos los medios concebibles para quitarles a los pueblos cristianos la fe. Y por supuesto, de prevalecer Darwin junto con otra bola de mentiras de todo tipo los pueblos abandonarían totalmente la iglesia y la Sagrada Escritura. Estamos por tanto presenciando los triunfos del Anticristo para que a la caída de este se establezca el reinado de Jesucristo sobre la faz de la tierra.


---¿No se le hace a usted que es demasiado agresivo con los judíos? Me parece que es usted un verdadero antisemita.


---¡Pero Cuatrohoras! ¿Cómo voy a ser antisemita si adoro a un judío llamado Jesucristo? ¡Que te digan los judíos a que judío adoran ellos para que veamos quienes son los antisemitas!


---Bueno amigo, ¡es que no puede ser tan malos como me dices!


---Pero Cuatrohoras, se están jugando su existencia misma como judíos y el perder la batalla más grande de la historia del hombre! Habiendo tomado del partido equivocado, se sienten en deuda con sus predecesores, con sus planes y sacrificios, todos ellos teniendo una sola meta: borrar el nombre de Jesucristo de la faz de la tierra. Para ello, siendo numéricamente la insignificancia misma han tenido que apelar por supuesto al engaño. Se han forjado la armadura de la mentira. Han reclutado ejércitos a la luz pública con el nombre de sindicalismo para dividir a patrones y obreros, democracia para dividir la sociedad en partidos, liberalismo para justificar la explotación más cruenta, socialismo para aprovechar la reacción dirigiendo a las masas ignorantes de todos sus planes contra sus intereses básicos, comunismo para adormecerlos con utopías cuya realización fracasada quedó manifiesta en su crudeza al caer el régimen y el muro de Berlín, y para que seguir con las sectas, el New Age, etc. etc. Puras farsas, fraudes, engaños, robos contra todos los pueblos del mundo.

En las tinieblas de las sociedades secretas han forjado y desarrollan sus planes. El dinero es la clave de todo su accionar ya que sin él, la mentira nunca habría podido prosperar y el cúmulo de engaños con los que traen engañado al mundo está en continuo peligro de desplomarse.

Sus planes son muy conocidos, porque de tiempo en tiempo los dan a conocer para ganarse adeptos políticos, sin temor porque ya nos tienen calificados como idiotas incapaces de reaccionar o de organizarnos. Su soberbia se acrecienta por los éxitos asombrosos que han alcanzado cambiando la historia por medio de personajes clave de quien nadie sospechó oportunamente que fuera judíos. Muchos presidentes, dictadores y dirigentes, hombres de estado, periodistas, cineastas, encueratrices, promotores de homosexuales, del aborto, y por supuesto de las doctrinas de Darwin, de Marx y de Freud. ¿Qué te parecerían los nombres de Antonio López de Santana y de Adolfo Hitler para comenzar?


---¡Por supuesto que de Hitler no lo creería!


---Ese es el problema. Como el demonio, traen engañado al mundo. Asunto sencillo cuando se tiene el control de las finanzas internacionales y de los medios de difusión. Con ese poder se puede mentir impunemente y traer engañado al mundo. Es un engaño muy merecido por nuestra falta de amor al único veraz que es Dios. Por nuestra tibieza a pesar de la demostración más grande de amor de la historia que nos diera Jesucristo en el Calvario. ¿Crees todavía que este mundo se merezca la verdad? Pero Dios el infinitamente veraz no nos deja a ciegas. Cada una de estas mentiras monumentales como la evolución contraria a su grandeza de Creador es un talón de Aquiles que mantiene la amargura y el insomnio de sus enemigos.


---Pero dígame, yo he oído que la evolución no se opone necesariamente a la fe. ¿Es cierto eso?


---Eso depende de a que fe te refieras. Hablando como católico mi fe se refiere al relato del Génesis sobre la creación y caída del hombre por el pecado original. Como podrás ver fácilmente, no es lo mismo el hombre cayendo por el pecado original a niveles bestiales que el hombre pudiendo ascender de los niveles bestiales hasta su situación actual. Como verás, no se opondría si ascender y descender no se opusieran. ¿Acaso es lo mismo subir que bajar? ¿No se oponen?


---Me sigue pareciendo increíble lo de los judíos.


---¡Pero Cuatrohoras, dónde tienes la cabeza? Piensa por un momento no sólo en el hecho de todos conocido del dominio judío sobre el mundo moderno, sino sobre el hecho mismo del fraude flagrante del evolucionismo a nivel mundial a pesar de constituir uno de los embustes más descarados y fáciles de refutar. ¿No te basta con eso?


---¿Debería?


---Por sí mismo es prueba contundente del control abrumador de los medios de difusión por un grupo de poder mundial combatiendo el primer libro de la Biblia, el Génesis. La imposibilidad de hacerlo queda en evidencia por lo burdo del engaño como ya vimos. Génesis es veneno puro para los fines del rabinato porque acredita a Juan el Bautista tildando de raza de víboras a sus predecesores . En otras palabras, por señalar a los judíos de su tiempo que la Mujer y su Descendencia, la Santísima Virgen y Jesucristo estaban ya en el mundo. Y Jesucristo N.S. le secunda de inmediato con la misma expresión y su equivalente de hijos del Diablo. Además de acusarlos de hipócritas, de sepulcros blanqueados, y de perdición del género humano: "«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y, cuando llega a serlo, le hacéis hijo de condenación el doble que vosotros!" (Mateo 23:15) ¡Que es precisamente lo que la historia del hombre desde entonces ha venido a demostrar que son! Además del hecho de haber crucificado a Jesucristo N.S., y no tanto en el Calvario que Él quiso para redención de todos, sino sobre todo por la persecución de todos sus seguidores a través de los siglos con la intención de borrar su mismo nombre de la faz de la tierra. ¡Por su odio incesante y total a Jesucristo y a su Iglesia!


---Más despacito... Dime primero amigo, en que parte del Génesis puedo encontrar lo de la raza de víboras. Después, ¿que no son los judíos el pueblo elegido? ¿Cómo pudieron y pueden hacer eso?


---Lo encontrarás en el tercer capítulo, versículo quince, que dice: "Enemistad pondré entre ti y la mujer; y entre tu descendencia y la suya, y ella te aplastará la cabeza mientras tratas de morder su talón." Como comprenderás, la descendencia de la víbora del jardín del Edén tiene que ser de su raza, raza de víboras. Y Satanás disfrazado de serpiente no iba jamás a dejar los disfraces de santurronería farisaica, falsos clérigos, masones, liberales, socialistas, comunistas, darvinistas, Etc., etc... En cuanto al hecho del Pueblo Elegido es real pero sujeto a las limitaciones que, Moisés de parte de Dios, propone al pueblo: (resumiendo Deuteronomio 11:26-28): "Mira: Yo pongo hoy ante vosotros bendición y maldición. La vida o la muerte. Bendición si cumples lo que te mando..." Como verás, fueron elegidos para una de dos, bendición o maldición, y de ninguna manera para quedar benditos hicieran lo que hicieran. En otras palabras, una cosa es que Dios eligiera a un pueblo para que hiciera su voluntad, y otra totalmente distinta, opuesta, de locos, que ese pueblo pudiera imponer su voluntad a Dios. Cuando cometieron el deicidio en Jesucristo incurrieron en la maldición: "Y todo el pueblo respondió: «¡Su sangre sobre nosotros y sobre nuestros hijos!» (Mateo 27:25) Maldiciéndose a sí mismos y a su descendencia, para confirmarse voluntariamente como raza de víboras porque en la lucha entre el bien y el mal tan solo hay dos bandos, y esa es la gran lección de Génesis 3:15. Jesucristo N.S. lo repetiría a los judíos en otra forma: "El que no está conmigo está contra mi." (Mateo 12:30). Pero debo aclararte que ni aún así se dejaron de cumplir las profecías, ya que el Señor que divide la historia en antes de Él y después de Él, dividió también a Israel en dos: Sus seguidores fueron los apóstoles que lo proclamaron al mundo sustituyendo con los gentiles conversos a los judíos que se maldijeron solos. Te dejo como tarea que leas un solo capítulo de la Biblia completo: Deuteronomio 28. Verás ahí, que todas las bendiciones se cumplieron en la Iglesia Católica. Todas las maldiciones cayeron sobre los judíos. Y seguirán hasta que se conviertan rechazando a sus antepasados en el deicidio como dice la misma Sagrada Escritura: «El que cree en el Hijo tiene vida eterna; el que rehúsa creer en el Hijo, no verá la vida, sino que la cólera de Dios permanece sobre él.» (Juan 3:36)


Cuarta Carta a la Pequeña Ale Cuatrohoras



Viernes 31 de enero de 2003




Correteada Cuatrohoras,

¡Siempre con prisas! Ya estábamos entrando en lo más sabroso de la plática cuando te llegaron comensales y tuviste que correr con el menú. Espero que te saques ese billete de lotería para que, retirada, además de dormir tus ocho horas podamos concluir siquiera una plática en vez de tenerme poniendo explicaciones por escrito.

¿Cómo pensar en Dios, y de Dios, siendo la omnipotencia misma? Esta era tu inquietud, y con sobrada razón. Te arrebata su inmensidad y poder tan contrastante con nuestras limitaciones. ¿El que abraza el universo podrá caber en nuestra mente?

Sin embargo, pequeña, nuestros antepasados indígenas del altiplano le llamaban El Señor del Cerca y del Junto; coincidiendo con Hechos 17:28 en que San Pablo elogiando la sabiduría de los griegos describe a Dios como Aquel en quien "vivimos, nos movemos y existimos, como han dicho algunos de vosotros: "Porque somos también de su linaje."

¿Cómo te deja eso? Recuerda que para muchos los aztecas eran culturalmente primitivos, y que los griegos no podían hablar de pertenecer a `Su linaje' por no ser judíos; sin embargo, esta sola cita los aproxima más a una verdad científica de Dios que la mayoría de los pasajes del Antiguo Testamento, y nos obliga a revisar la historia de exclusividad en gracia del entonces Pueblo Elegido.

Bonita concordancia entre aztecas y griegos. Veamos ahora la cercanía de la Fuerza Omnipotente en el terreno científico yendo de fuera hacia el centro del átomo: Los explosivos que usan los terroristas estallan por el reacomodo de los electrones pero sin tocar los nucleones (protones y neutrones). Los explosivos atómicos liberan energía derivada del reacomodo de los nucleones: El equivalente a una moneda de cincuenta centavos destruyó Hiroshima en la Segunda Guerra mundial con este sistema, fue la cantidad de masa que se convirtió en energía del total de la bomba atómica. La misma cantidad bastó para Nagasaki. Yendo más hacia el centro del átomo... ¡Ni pensar en lo que sería liberar la energía con una bomba de quarks, dijo un experto hace poco tiempo! Enorme es el poder de Aquel en quien vivimos, nos movemos y somos: Infinito.

Y me parece, linda pequeña, que considerando su masa, cada uno de tus aretes tiene más energía potencial de la que hay en una moneda de cincuenta centavos...Lo que hace más sorprendente el orden perfectamente controlado de nuestro mundo. ¡Como que Dios es amor! El maravilloso equilibrio del orden lo describe Richard Feynman en un párrafo: "Para dar una idea de cuanto más fuerte es la electricidad que la gravedad, consideremos dos granos de arena de un milímetro de diámetro cada uno separados a una distancia de treinta metros. Si en vez del equilibrio de los átomos eléctricamente neutrales tuviéramos sólo su fuerza de atracción, ¡esta sería de tres millones de toneladas entre ambos!

¿De que vamos a dudar, de la fuerza o del amor? ¿O de la inteligencia reguladora de nuestro mundo?

¿Cómo pensar de Dios? Con amor, con asombro, con adoración, con alabanza, ¡con gratitud!

Y para ti, mi amor de siempre.



Cuarto diálogo con la Pequeña Ale Cuatrohoras

¿Qué te pareció mi carta?

---Que mejor me quito los aretes.

---Calma Cuatrohoras, ¡que distan mucho de estar configurados en bomba!

---Oye, ¿qué solo tú tienes ganas de bromear?

---¡Vaya!

---¿Cómo que vaya, ni que fuera tonta!

---Yo nunca di a entender eso.

---Pero esa cara de alivio...

---¿Qué conclusiones sacas?

---Mira amigo, si te entendí bien, lo que me quieres decir es que para mantener bajo control un poderío tan grande se requiere de un amor, y de una inteligencia ordenadora igualmente grande.

---Brillante, Cuatrohoras, has entendido a la perfección.

---Como verás te entiendo, pero quisiera saber más. ¿Qué de veras no cae la hoja de un árbol sin la voluntad de Dios?

---Esa expresión que parece exagerada sobre los alcances de la Divina Voluntad, lejos de exagerada resultó minimizada por un experimento mental y el cálculo correspondiente. La historia es asombrosa, sobre todo por la forma en que se ha impedido su difusión.

---¿Es difícil ese cálculo?

---Verás que el experimento es tan contundente que ni necesitas llevarlo a la práctica, mucho menos meterte a calcularlo. Esta es la historia: Las burradas de Darwin despertaron la curiosidad de un gran físico experimental de nacionalidad suiza, Charles Eugène-Guye fallecido en 1942, y famoso por haber aportado la primera prueba del aumento de la masa en partículas viajando a velocidades cercanas a la de la luz. El problema para Guye era fácil de plantear, fíjate bien: La unidad básica de toda vida es la célula. Unas diez mil células humanas promedio caben en la cabeza de un alfiler. Y unas treinta mil moléculas componen una célula. Por tanto, trescientos millones de moléculas caben en la cabeza de un alfiler. ¿Qué probabilidad habría de que UNA SOLA MOLÉCULA DE PROTEíNA, se integrara al azar, por efecto de las solas fuerzas materiales y por el solo transcurso del tiempo?

Para facilitar la integración al azar de una molécula de proteína, el número de átomos se redujo al mínimo, a tan solo 2000. Las moléculas de proteína son `sustancias de importancia fundamental en todos los seres vivos, responsables de la estructura y funcionamiento celular. Son compuestos cuaternarios formados por carbono, oxígeno, hidrógeno y nitrógeno; y en ocasiones también de azufre, fósforo, o iones metálicos. Todavía se simplificó más la molécula imaginaria a tan solo dos elementos en vez de cuatro, el peso atómico a diez y el peso molecular a 20,000. Todo para facilitar lo que los evolucionistas pretenden por medio de un experimento.

Dos mil átomos de dos elementos que vamos a representar con colores distintos: Mil bolitas blancas y mil negras. Las colocamos en un tubo de cristal como dos conjuntos perfectamente ordenados: juntas las de cada color dentro de un tubo de cristal cuyo diámetro está ajustado para impedir que se salten unas a otras desordenándose. El tubo está sellado por abajo, y arriba del mismo, unido al tubo, hay un recipiente de cristal con capacidad para muchas más bolitas para poder después agitarlas mezclando las dos mil con comodidad.

Damos principio al experimento volteando nuestro aparato para que caigan todas las bolitas en el recipiente y después agitamos para que se mezclen. Después las regresamos al tubo tantas veces como sea necesario hasta que vuelvan a quedar, agitación tras agitación de por medio, de nuevo separadas totalmente. ¿Te gustaría dedicarte a ello pequeña?

---Ni de loca, amigo, mejores cosas se me ocurren para perder el tiempo.

---De acuerdo. Pero fíjate bien que de estar tan perfectamente separados los átomos en dos grupos tendríamos dos conjuntos ordenados pero no una molécula. Para estructurar una molécula, obviamente tendremos que desordenar los conjuntos, y, al habernos reducido a solo dos tipos de átomos el leve desorden introducido hará más viable la probabilidad de lograrlo. El genio de Guye tuvo un éxito aplastante por lo pequeño que es el átomo y por lo altamente estructuradas que se encuentran las moléculas de proteína. Experimento que exigía un elevado desarrollo de las ciencias como se dieron en la década de los treintas del siglo veinte. Veamos el resultado del primer cálculo:

Las probabilidades de que podamos devolver las bolitas a su distribución inicial, o sea a un grado de asimetría de 1 (totalmente separadas) es de 0.489 X 10-600 (menos seiscientos como exponente [problema de tipografía en el blog]) = 0.(aquí van seiscientos ceros) 489. Parece una ociosidad completa para llenar una página de ceros hasta que comparas lo que ocurre con una molécula real cuya asimetría ya no es de 1, sino de tan sólo 0.9 para encontrar:

2.02 X 10-321 = 0. (aquí van trescientos veintiún ceros) y luego 202. Como verás, siendo el resultado inconcebiblemente más probable que antes, sigue siendo casi igualmente absurdo. Y estamos hablando de una sola molécula de las que caben trescientos millones en la cabeza de un alfiler. Si pretender que se dé una es un absurdo, que se dieran dos sería el absurdo al cuadrado. Esto, pequeña, nos permite ver que lo increíble no es que Jesucristo hubiera multiplicado siete panes y dos pescados para alimentar a cinco mil hombres, lo increíble es que se le hubiera dificultado hacerlo, o que se le hubiera dificultado la creación del universo. Siempre fue el orden una prueba magnífica de un ordenador, Dios. Pero requerimos de la ciencia moderna y de Charles-Eugène Guye para que el orden fuera, más que una prueba, una verdadera descripción de Dios, y de su poder, al nivel de la ciencia.

---Esto, amigo, es para que el mundo lo supiera.

---En eso estamos, pequeña, en eso estamos.





Quinta Carta a la Pequeña Ale Cuatro Horas.

Ni más, ni menos, de Tres Personas en Dios



Miércoles, 5 de febrero de 2003.



Ale Pequeña:

Quiero seguir hablándote de Dios con la misma sencillez, y terminar ahora de explicarte lo que inicié en mi segunda carta: que en Dios hay tres Personas, y que no puede haber ni menos de tres, ni más de tres. Y, para que nadie se escandalice de que tu amigo pretenda tratar de la Naturaleza Divina con la simpleza de los problemas contables, debo decirte que, habiendo señalado la infinita grandeza y magnificencia de Dios que sostiene todo el universo material en la existencia instante tras instante, y sin haber entrado siquiera a la existencia de los seres vivos, y menos aún de los seres espirituales que de Él proceden, ¡es muy obvio que su Infinita Grandeza no es algo que esté yo poniendo en duda! ¿Cómo justificarme entonces?

Voy a justificarme usando la más antigua de las descripciones de Dios de los grandes teólogos católicos: Deus simplisimus est. Que traducido al castellano dice "Dios es sencillísimo". En otras palabras los complicados somos nosotros. Tan complicados que difícilmente nos entendemos.

San Ignacio de Loyola en Manresa, esa cueva de sus angustias místicas y estirones del alma recibió de Dios un don desproporcionado a su tiempo y a la comprensión de sus contemporáneos: Vio La Creación, y atestiguó: "Dios hizo el mundo de una manera tan sencilla que nuestras mentes son demasiado complicadas para entenderlo". Imposible decir más; pero, ¿qué no darían todos los premios Nobel por tal momento?

El Espíritu Santo se dosifica a Sí mismo para recibir el nombre de Gracia Santificante como cuando dio esos tremendos estirones al alma acongojada de Ignacio en Manresa para reforzar su decisión y carácter, y dotarlo de sabiduría. Dios cincela las almas escogidas, las refina a fuego para librarlas de la escoria, las purifica como el oro en el crisol para hacerlas dignas de Sí. Recordemos el tremendo precedente a Manresa en la Agonía de Jesús en el Huerto, camino a la Cruz.

Deus simplisimus est. Tan prácticas son estas enseñanzas de la sencillez que con base en ellas podemos entender el desarrollo de la computación. Otra de las descripciones teológicas: "Dios es como un puntito pero infinito", nos lleva a pensar en el desarrollo de las computadoras, el desarrollo de su poderío está fundado en la miniaturización. En añadir mayor número de transistores en un espacio cada vez menor. Los técnicos, sin saberlo, parecieran inspirados por los grandes teólogos.

Pero ahora nos toca recordar ese punto de mi segunda carta a la pequeña Ale Cuatro Horas en la que te hacía ver que, el insensato concepto de los monoteístas unitarios (judíos y musulmanes) conduce necesariamente al problema de que no tiene ningún sentido un Dios capaz de comunicarlo todo sin un Igual capaz de recibirlo todo. Recordarás que te ponía yo como ilustración el discurso ante los 500 de la Cámara de Diputados en el que no habiendo nadie capaz de entenderlo todo, de nada servía que la comprensión del total se lograra con la suma de un quinientosavo por parte de cada diputado ¡que desperdicio de discurso!, te dije en aquella carta.

Esto nos da la primera pista del porqué en Dios hay Personas, después veremos porqué no puede haber ni menos de tres, ni más de tres.

Recordemos primero de Génesis 1:26 la creación del hombre: "Y dijo Dios: «Hagamos al ser humano a nuestra imagen, como semejanza nuestra»". Y del Evangelio: "Jesús le respondió: «Si alguno me ama, guardará mi Palabra, y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada en él." (Juan 14:23)

La Sagrada Escritura nos habla del hombre creado trinitario para ser habitado por la Santísima Trinidad, a lo que el bautismo la deja dispuesta: "Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo" (Mateo 28:19)

Pero hay un solo Dios: "Escucha, Israel: Yahveh nuestro Dios es el único Yahveh". (Deut. 6:4). Ahora fíjate bien: Hay un solo Individuo a quien llamamos Dios, y en Ese Individuo hay Tres Personas. Hubo un solo individuo llamado Adán, el cual siendo imagen de Dios tiene, como imagen, que ser trinitario. Para que no quedara duda Eva no es creada en consecuencia de esas palabras, sino que es 'tomada de la costilla de Adán' y será trinitaria como 'clonación diferenciada de Adán'. Conclusión: De mucho atrás venimos acarreando una confusión semántica entre individuo y persona.

Si esto no fuera avalado por todas las ciencias, y fuera el camino hacia la psicología verdadera, la modernidad podría descartarla como asunto de locos. Pero todos nuestros conocimientos avalan este hecho sorprendente que la realidad confirma a cada paso: Siendo El Creador Trinitario, Trinitario Es Su Sello. Toda verdad fundamental es así: Una, pero que no puede prescindir de tres elementos que la componen para estar completa. Y siempre son tres en la unidad. Es como un nuevo tipo de unidad de cuenta. Más adelante recibirás una carta explicativa del porqué para ser individual requieres ser tri-personal, y sobre como se manifiestan en ti plenamente diferenciadas estas tres personas que son la fuente de todo tu dinamismo humano.

De momento recuerda que las limitaciones tienen que tener un origen. Y que ya habíamos dicho que Dios nunca tuvo principio y por lo tanto un origen que lo limitara.

No teniendo El Padre limitaciones, engendró a su Hijo con toda su propia perfección: Infinito. Refiriéndolo a nuestro ejemplo anterior con la capacidad de entender el discurso completo. Pero como en Dios la limitante del tiempo no puede existir, el `engendró' no es algo que discurra en el tiempo sino que hace referencia a su eterno presente, ¿recuerdas? "Tu eres Mi Hijo, Yo Te He Engendrado Hoy".

Comparemos: Tú, pequeña, has dejado se ser la niña que fuiste, y no eres aún la sabia anciana que un día serás. Dado el tiempo nos poseemos por partes, ganamos pero perdiendo, y elegimos renunciando. Ganamos el vigor de la juventud pero ¿que queda de la inocencia, confianza, capacidad de asombro y genial curiosidad de la infancia? Perdemos tantas ilusiones en el camino aunque ganemos tantas libertades. ¿No hemos extrañado tanto en cada etapa que añoramos no poder volver? Y en cada una, ¿no deseamos algo que sólo el futuro promete? ¡Cuánto quisiéramos tener lo mejor de todas juntas hoy y para siempre! He ahí la limitante que en Dios no se da como en nosotros. Él Es donde nosotros devenimos. Elegimos sin conocer las plenas consecuencias y lo que el futuro traerá, Dios elige con absoluto conocimiento de hasta las últimas consecuencias porque el futuro para ser, en Dios tendrá que ser, y conforme a la voluntad sin límites de su Infinito saber.

Siendo una sola la naturaleza divina ¿cómo podría el Padre con infinito amor por su Hijo dotarlo de toda perfección sino despojándose Él mismo y por amor de absolutamente todo menos de su carácter de Padre? Pero, ¿a quién podría volverse el Hijo dotado del Amor Infinito que fuera digno de ese Amor sino a Su Padre?

Jesucristo N.S. se lo dijo de una manera muy simpática a Concepción Cabrera de Armida: "Si no hubiera salido Yo tan buen Hijo como salí, no existiría nada de cuanto existe". Dentro de los misterios del Dios infinito está el hecho de que Dios ha sido siempre así: Padre, Hijo y Espíritu Santo. También reveló Jesucristo N.S. a Concepción Cabrera de Armida la intensidad del Amor que Es el Espíritu Santo. Ahí donde el Padre para dotar a su Hijo de toda perfección quiere despojarse de todo para dárselo, el Hijo quiere igualmente devolverlo todo, toda la infinita riqueza de la naturaleza divina a Su Padre. ¡Qué hermosa batalla del Amor Infinito en esa mutua dación de si! Fuego de Amor Infinito que revela Jesucristo diciéndole: "Aún un ángel que pretendiera descorrer el velo de ese Amor que es el Espíritu Santo quedaría fulminado".

El Espíritu Santo como Persona Es inimitablemente Único. Quiero anticiparme en este punto dada la ignorancia de una secta que pretende reducirlo a una mera fuerza haciendo uso de una analogía muy conocida derivada de la forma tripartita de gobierno que reconocemos al hablar de tres poderes distintos pero un solo gobierno verdadero. El Padre está representado por el Poder Legislativo: Es ante todo El Legislador. El Hijo lo está por el Poder Judicial (así lo señala El Evangelio): Es El Juez Supremo. El Espíritu Santo está representado por El Poder Ejecutivo. Y como humanos integramos cámaras legislativas, colegiado para la Suprema Corte, pero tratándose del ejecutivo (arriba dijimos inimitablemente único) sólo hay lugar para UNO: El rey, el presidente...

Recuerda también que Dios es Espíritu. Por tanto es fecundidad infinita porque en Dios no hay sexo, el sexo es otra limitante. El Padre se conoce a sí mismo sin límites, conocimiento que a la vez es expresado con la misma perfección tradicionalmente su Verbo o Palabrasu Hijo, y es tan perfectamente Persona como el Padre. "Y una voz que salía de los cielos decía: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco.» (Mateo 3:17 en el bautismo en el Jordán). Y: "Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y de la nube salía una voz que decía: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco; escuchadle.»" (Mateo 17:5) En la transfiguración. Todo esto responde a una lógica inquietud: pudiendo los hombres engendrar hombres como nosotros, El Omnipotente ¿podrá menos, o más?

Nuestros hijos pueden superarnos en comprensión porque somos limitados; de hecho, mientras más hijos la riqueza derivada del compartir aumenta con el número enriqueciendo a la familia. Lo limitado se suma con ventaja. En las familias, no importa cuán numerosas, lo que uno tiene, de parte de ello otro carece y se complementan y ayudan. Un Padre Infinito ni puede ser superado en comprensión, ni puede desear más que del Hijo Infinito.

En comparación con lo humano sólo había lugar a un Hijo divino. Dos y habrían tenido que dividir entre sí sus cualidades y perfecciones, lo equivalente a una minimización y complicación, la reintroducción de la dificultad para poder entender con la debida perfección el discurso completo. En otras palabras: Es por razón de nuestras limitaciones que requerimos de muchos para poder entender y desarrollar, sin que esa comprensión sea cabal. No así en Dios.

En la Santísima Trinidad podemos adorar a un Dios a la vez amantísimo y humildísimo en el Amor que lo caracteriza en cada una de sus Divinas Personas. Nos permite entender a Jesucristo en la Cruz representando como hombre el mismo papel que como Verbo eterno del Padre realiza en la eternidad. Amar con locura. Amar al Padre en esos momentos como lo ama eternamente, con Amor sin límites, con entrega sin límites. Con el Espíritu Santo.

Y si esto se te hace difícil de entender, Cuatrohoras, más fácil sería que una ardilla pudiera comprender a la pequeña Ale Cuatrohoras a que cualquier ser humano pudiera comprender al Dios infinito. Al hablar de Dios balbuceamos tan sólo. Pero gracias a los místicos tan ricos en revelaciones divinas progresamos.

Son sólo señalamientos, algo que vale la pena decir por alejado que se halle de tu comprensión y de la mía: Recordemos el HOY. El HOY único en el que existe todo, con exclusión de todo pasado y de todo futuro con perfecta economía. HOY singular de cada instante y momento. HOY que contiene la totalidad del espacio, de la materia y de la energía, de toda forma de vida incluyendo la humana, de todo espíritu incluyendo a la Santísima Trinidad, único existente esencial, y de cuya existencia participan todas las cosas. Las ciencias han progresado en este sentido. Las matemáticas con Georg Cantor nos presentan al conjunto de todos los conjuntos. La física nos presenta el concepto de la Asimetría Fundamental por el cual reconocemos la veracidad del Credo católico que nos dice que en el Verbo fueron creadas todas las cosas. Para los físicos se trata de materia y antimateria, que de no ser por esta asimetría fundamental, y de existir conjuntamente la materia y la antimateria cuanto existe del universo material se convertiría en luz. Y toda la física del átomo hacía el mundo subatómico nos recuerda el discurso del Areópago de san Pablo en los Hechos de los Apóstoles, párrafo que establece Nuestra Relación Existencial: "El Señor Dios por quién vivimos, en quién vivimos, nos movemos y somos". ¿Complicado? No te preocupes, ahora volvemos a lo sencillo.

Por consiguiente, todo cuanto existe es fruto de un romance entre un Padre y su Hijo. Todo el universo material, toda la vida animal, todos los seres espirituales, absolutamente todo incluyendo lo que ni siquiera podemos alcanzar a imaginar. Todo lo creado que no conocemos y todo lo que llegará a existir siempre dentro del HOY, del eterno presente de Dios.

Pero resulta igualmente evidente por las diferencias: que el Padre amantísimo, al engendrar a su Hijo igual a Él y perfecto como Él solo podría engendrarlo en y de Sí mismo. Esto a diferencia de ti, pequeña Ale Cuatro Horas, que cuando engendraste a tu hijo pudiste y tuviste que apelar a alimentos externos para que se fuera formando dentro de ti, lo que hizo del conjunto madre-hijo dos individuos perfectamente diferenciados y separados. Dios, por razones obvias al engendrar a su Hijo como Persona siguió siendo un solo Individuo. En otras palabras siendo Dios el único existente, el Padre engendró una Persona perfectamente diferenciada pero dentro de su misma, única, simplísima, e indivisible naturaleza divina. El amor y perfección con el que Dios engendra a su Hijo conduce al Hijo a amar a Su Padre con el mismo Amor y perfección. Ese Amor entre el Padre y el Hijo es el Espíritu Santo. Para entender por qué el Espíritu Santo es Persona y es Espíritu vamos para comenzar a apelar de nuevo a la contabilidad. ¡Y que nadie se escandalice!

Habíamos dicho: ni menos de tres, ni más de tres. Veamos ahora algunos ejemplos de como Dios lo ha creado todo mostrando su Trinidad en la unidad.

Siendo Dios Trinitario, Trinitario es su sello. Todo lo creado refleja la naturaleza divina en cuanto trina en la unidad. Esto con especial referencia a las verdades fundamentales de todas las ciencias. ¿Y cómo podría ser diferente si en la creación el Dios único obra con el poderío conjunto de sus tres Divinas Personas, y precisamente porque Dios es uno? Como tú sabes, pequeña Ale Cuatro Horas, no hay forma de contabilizar con eficiencia si no se hace con partida doble: A todo cargo corresponde un abono, y a todo abono corresponde un cargo. Lo que nos hace reír de que sea llamada de partida doble y no de partida triple, ya que la acción de correspondencia que también podríamos representar por el signo igual es la parte indispensable para completarla. Pero al mencionar la palabra acción mencionamos algo distinto a los montos iguales que se asientan, y que por ser acción representan cabalmente al espíritu (desde Aristóteles aceptamos un alma vegetal y un alma animal además del alma humana). Alma que es la vida, su principio vital y a la vez su ordenamiento. Su principio activo. Su organización.

Ahora fíjate que interesante: Todas las actividades contables terminan en el balance general compuesto por el activo, el pasivo y el capital. Una cabal trinidad. ¿Puede ayudarnos la contabilidad a entender mejor el Misterio Fundamental de la Fe Católica? ¡Veamos si no! El capital viene siendo un reflejo del Padre por ser el fundamento mismo del acreditamiento. Donde no hay capital no habrá crédito. No en el sentido contable. Para una simetría perfecta y una acreditamiento de máxima eficiencia solo podría haber un peso de pasivo por cada peso de capital. ¡Ah! Pero el activo, como era de esperarse, es la suma del capital y del pasivo como actúan en la realidad. La teología católica nos habla del misterio trinitario como la igualdad de las tres divinas Personas en su grandeza, dignidad y majestad. Pero también nos habla de la procesión: el Padre engendra al Hijo, y del Padre y del Hijo procede el Espíritu Santo. Pero si el Espíritu Santo procede también del Hijo como que compensa al poseer en su acción todo lo que procede del Padre y del Hijo.

Vale la pena recalcar como lo reflejado en la contabilidad se manifiesta mayormente cuando hablamos del gobierno. De cualquier forma de gobierno. Lo que viene siendo muy obvio cuando aceptamos que uno solo es el verdadero Gobernante. En lo humano, trátese de un rey con poderes absolutos o de un sistema democrático, las funciones de gobierno serán siempre tres, no pudiendo ser ni menos ni más de tres: legislativa, judicial y ejecutiva.

Como es obvio la legislativa es la primaria, reflejando a la Persona del Padre, el Eterno Legislador. Sabemos por el evangelio que Jesucristo es él Juez, y así lo dice Él: "Porque el Padre no juzga a nadie; sino que todo juicio lo ha entregado al Hijo,..." (Juan 5:22).

Y la función ejecutiva corresponde al Espíritu Santo tal y como era de esperarse, con una ventaja adicional que nos permite entender con mayor fuerza que ninguna otra su Personalidad perfectamente individualizada y diferenciada. Fíjate bien pequeña, en las funciones de gobierno: el Poder Legislativo es representado normalmente por un gran número de individuos. Como ya mencioné en la sola Cámara de Diputados hay 500. El Poder judicial también, nuestra Suprema Corte de Justicia está integrada por once ministros. Pero cuando del poder ejecutivo se trata, solo hay lugar para uno. Dos, y tendríamos la anarquía.

Por consiguiente ¿cómo negar que el Espíritu Santo sea Persona? Cuando de actuar se trata la unidad de mando es indispensable. Fíjate entonces como solo Dios es digno de ser estudiado y amado por encima de todas las cosas. Olvidar a Dios es nuestra mayor tragedia. Tener tres poderes constitucionales olvidados de Dios y sin respeto alguno por Él es estar camino a ser gobernados por el diablo. El Legislativo se olvida del derecho natural y del bien del pueblo. El judicial se vende al mejor postor. El ejecutivo roba y engaña como ninguno. ¿Es eso un gobierno? Por algo rezamos el Padre Nuestro diciendo: "Venga a nos tu reino".

El reflejo en las funciones de gobierno es tan claro, que todo juez en cuanto juez es hijo del legislador. Es hijo porque recibe su ser, su existencia en cuanto juez al recibir la ley del legislativo para juzgar obedientemente conforme a la misma.

Juez que no acata la ley ha dejado de ser juez para convertirse en un antagonista directo del legislador. La función judicial es, y será siempre, subordinada: "..porque el Padre es más grande que yo..." (Juan 14:28)

La función ejecutiva está igualmente supeditada a la ley, debiendo el ejecutivo acatar también las decisiones judiciales. En el evangelio Jesucristo N.S. es igualmente claro al referirse al Espíritu Santo: "Vendrá el Espíritu Santo y os comunicará de lo mío, porque todo lo del Padre es mío" (Juan 16:14-15). Como puedes ver el evangelio es todo un tratado de derecho constitucional. ¡Y por supuesto que mucho más que eso!

Pero hay un punto adicional previsto por la teología católica que nos permite completar la división tripartita de poderes en la unidad de un solo gobierno: La circumincesión. Toda función de gobierno se encuentra como insertada en la otra. Así vemos que el legislador tiene que juzgar si lo que va plasmar como ley es bueno, y la calidad hasta el último detalle. Tiene igualmente que cumplir con la función ejecutiva de promulgar. El judicial tiene la función propia de completar continuamente por medio de la jurisprudencia las funciones legislativas, e igualmente procede como ejecutivo al sancionar. El ejecutivo tiene igualmente facultades para proponer leyes y en todo momento se ve obligado a ejercer su juicio dentro del marco constitucional. Es también en el gobierno humano, y por medio de la circumincesión como justificamos la plenitud de los poderes ejerciendo como vicarios su responsabilidad ante el Dios Uno y Trino. ¿Que tenemos? ¡Tres poderes distintos pero un solo gobierno verdadero! ¡Si tan sólo tomaran por modelo de perfección a la Santísima Trinidad!

¿Por qué siendo todo tan claro nos hacemos los reacios en aceptar el Misterio Fundamental de la fe católica, no creyéndolo, desvirtuándolo, o simplemente ignorándolo? Su presencia está en todas partes.

Nos habla de Él la astronomía: Todos los grandes cuerpos celestes son esféricos, y la esfera es el símbolo perfecto de la Santísima Trinidad en el espacio tridimensional conforme al dogma católico de la igualdad de grandeza y majestad de las Tres Divinas Personas, porque toda esfera se genera por tres ejes de igual magnitud. Por igualdad en la grandeza, dignidad y majestad, puedes entender pequeña Ale Cuatro Horas que las Tres Divinas Personas son todas y cada una de ellas igualmente dignas de estudio y de adoración.

En el plano (dos dimensiones) tenemos las órbitas de los planetas: Todas ellas son elípticas, y ¿cómo se traza una elipse? Para que te diviertas un rato clava dos clavos en una tabla. A continuación amarra un cordón en ambos extremos a los clavos que quede bastante suelto. Ahora con un lápiz y tensando el cordón con un lápiz dibuja sobre la tabla primero la parte de arriba y después tensando hacia abajo la parte de abajo. En la medida en que el cordón sea más largo, o lo que es lo mismo, que los clavos estén más juntos la elipse será más circular y viceversa lo será menos.

En resumen podemos decir que la elipse es un caso particular del círculo (que cuando gira sobre su eje da lugar a la esfera) y que se logra dividiendo el centro en dos. ¿Qué hemos logrado? Los dos polos (clavos) representan al igual que en el caso del pasivo y el capital a las dos primeras Divinas Personas, y la órbita con su dinamismo al igual que el activo al Espíritu Santo. Apelando a tus recuerdos del sistema solar, el sol se encuentra en uno de los focos de todas las órbitas que siguen los planetas del sistema. Los otros focos no los vemos como vemos al sol, pero geométricamente existen para cada órbita.

Y para seguir con el sol, este está compuesto por dos fuerzas y un punto de equilibrio: La del estallido nuclear (es una gigantesca bomba de hidrógeno que no para de estallar), la gravitacional que regula perpetuando el estallido impidiendo que los átomos que componen su plasma salgan volando hacia el espacio y se acabe el sol, y el equilibrio entre las dos; gracias al cual el sol ha durado, dura, y durará ¿¿¿ algunos miles de millones de años???. Por consiguiente, para hablar del sol tenemos que hablar de sus tres componentes siendo el equilibrio entre las fuerzas la clave de sus funciones de la misma manera que el ejecutivo lo es para el gobierno y los precios para la economía.

La economía en sus elementos fundamentales se reduce a una curva de demanda, a una curva de oferta, y la intersección de ambas que representa el equilibrio (como en el sol) en el que se fija el precio. La dinámica (espíritu) nos es dada por el precio. Cuando el precio aumenta los productores incrementan la oferta, cuando disminuye, los productores la disminuyen. Los compradores ajustan igualmente y por lo general el consumo a los aumentos y disminuciones en los precios. Todo, como verás, se mueve ejecutivamente por el precio, y en un mercado libre este esquema trinitario rige, y el precio es el ejecutivo.

Hay un ejemplo que no podemos dejar fuera, y que se refiere a la forma en que es gobernada nuestra inteligencia, la cual, en el terreno deductivo se apoya en el silogismo que se compone de tres partes igualmente valiosas para integrarse en su unidad: La premisa mayor, la premisa menor, y la conclusión. Una Trinidad completa como era de esperarse. Yo creo que ya comienzas a caer en cuenta de que lo prometido lo estoy cumpliendo. De que la ciencia moderna para poder hablar verazmente tiene que hacerlo conforme al dogma de la Iglesia Católica.

Ya no quiero alargarme pequeña Ale Cuatro Horas, sino dejar para mi próxima carta, y por medio de la naturaleza humana creada a imagen y semejanza de Dios la verdadera naturaleza, composición, y análisis del alma para poner fin a las supercherías de psicólogos, psiquiatras, y demás brujos modernos.

Quedo de ti, pequeña Ale Cuatro Horas, con el cariño de siempre...



Quinto diálogo con la pequeña Ale Cuatro Horas

¿Qué te pareció pequeña Ale Cuatro Horas, no es todo en el fondo sencillísimo?

---Mira amigo, a ti te parece sencillísimo todo porque estás viejísimo y te la has pasado pensando. Pero si fuera todo tan sencillo como lo ves, no crees que ya todo mundo habría caído en cuenta?

---¿Qué quieres Cuatro Horas? ¿No te había dicho ya que mientras que Dios es sencillísimo nosotros somos tan complicados que ni sólos nos entendemos?

---¿Y porqué somos complicados, que no habría sido más fácil que Dios nos hubiera creado sencillos?

---Quieres decir sencillos y sabios ¿verdad Cuatro Horas?

---¡Por supuesto!

---¡Pues así es, precisamente, como fuimos creados!

---¿Cóoomo?

---¿Te has olvidado, Cuatro Horas, que Dios nos creó a Su imagen y semejanza?

---¿Quieres decir sencillísimos y muy sabios?

---¡Por supuesto! Además de trinitarios.

---¿Entonces por que somos complicados?

---Por el Pecado Original.

---Pero amigo, ¡entonces el Pecado Original debe ser de lo más estudiado del mundo!

---Pues fíjate que no Cuatro Horas.

---¿Pero por qué?

---Por que tiene que ver con el sexo, y todo mundo ha tenido siempre problemas para tocar el tema con dignidad y seriedad. Ve el problema que hemos tenido los padres para explicar eso a nuestros hijos. Yo ni siquiera me acuerdo que mis padres me lo hayan explicado a mi, de hecho lo aprendí en la escuela y sacando mis propias deducciones. Y lo que es peor, tampoco me acuerdo haberles explicado a mis hijos nada sobre ello. ¿Cómo hablarles del sexo sin pudor alguno y sin tocar a su pudor y a su inocencia? ¿Cómo decirles somos tan bestias que nos reproducimos como las bestias? Ambos bandos han tenido problemas con el caso. Los partidarios del diablo porque no pueden descararse diciendo a quien sirven cuando promueven el libertinaje sexual y la pornografía por todos los medios, y los sacerdotes partidarios de Dios por querer ver el aspecto puro y bueno del sexo dentro del matrimonio, sin encontrar la forma de presentarlo a la vez, como algo bueno y puro dentro del matrimonio pero sólo para los hijos para no incurrir en bestialidades y en vicio sexual. Como informar que es obra de Dios, pero también victoria del Diablo. Así que caen en una aberración mayor al permitir que se le confunda con el amor.

---A ver, ¿Cómo puede ser a la vez obra de Dios pero victoria del Diablo? ¿No estarás medio loco amigo?

---Recuerda siempre que lo que Dios pierde en su misericordia lo recupera por su justicia. Por lo tanto ese fue el castigo Cuatro Horas. Es obra de Dios porque no hay otro creador fuera de Él. Fue victoria del Diablo porque era su propio plan contrario al de Dios sujetarnos por los vicios sexuales. Fue lo que quisieron Eva y Adán, y fue su castigo el recibir lo que querían contra la voluntad del único infinitamente sabio y bueno.

---¿Y como lo sabes?

---Recuerda ante todo que Dios nos creó a su imagen y semejanza, y en Dios no hay sexo. Sería ridículo encontrar que hubiéramos sido creados a su imagen y semejanza pero con injerto de burro y de burra ¿no crees?

---¿Y eso es todo?

---No Cuatro Horas. Las obras grandes son fruto de grandes planes, y la criatura de mayor perfección creada por Dios hasta entonces era Luzbel. Era el equivalente en poder de difusión a todo lo que vemos hoy en la televisión y el cine. Luz que atrae y tiene poder por su fuerza para llamar la atención, conservar la atención, influir en las conciencias y dirigirlas, y por ellas los acontecimientos. Como luz dada por Dios debía haber edificado a los demás ángeles dirigiéndolos hacia Dios en su libre albedrío. Pero cuando Dios le comunicó su intención de la Encarnación para que por un Hombre-Dios fuera exaltado el hombre, no pudo resistirlo su orgullo y se rebeló. ¿Cómo aceptar que una criatura tomada del polvo de la tierra le superara en grandeza. Supo ahí que en los planes de Dios sería desplazado. Como en efecto lo fue y desmesuradamente por la Santísima Virgen, ya que el Hombre-Dios iba a tener la perfección de Dios, y en los orígenes están las limitaciones. Cualquier limitación en la Madre y el Hombre-Dios tendría que tenerla también en cuanto hombre, y Luzbel entendía esto con claridad.

Es por eso que el Pecado Original fue fruto de un gran plan derivado de una gran inteligencia. Lo más obvio es que no pudiendo disuadir a Dios de sus proyectos, le quedaba un solo camino: degradar al beneficiario para hacerlo indigno de tal don. ¿Pero cómo? Adán había crecido en sabiduría y gracia día tras día, y no era víctima fácil. Eva, creada después era más ingenua. De poderla engañar dependía todo su plan. Y ese plan tenía que reunir varios requisitos. El primero era que esa criatura, Eva, aceptara degradarse a lo que llamamos el reino animal por la sexualidad. De aceptar, borraría en sí misma la imagen y semejanza con Dios.

---Un momento amigo. ¿Cómo iba a convencerla para querer el sexo cuando no tenía sexo?

---Recuerda primero que Eva fue tomada de la costilla de Adán. Recuerdas a una oveja famosa llamada Dolly que fue clonada, llegando a la vida sin necesidad de sexo?

---Claro que me acuerdo.

---Pues si tratas de explicarle a un campesino la clonación no te iba a entender mucho que digamos, pero si refieres el hecho a la creación de Eva de la costilla de Adán iba a aceptar el hecho de inmediato, aunque para ser precisos Dolly era una calca casi perfecta a diferencia de Eva que era complemento, y no calca, de Adán. En otras palabras: Dios, por así decirlo, clonaba y lo hubiera seguido haciendo a todo el género humano para ser reconocido Él por todos como único y verdadero Padre de todos y cada uno de sus hijos. De ahí que la recuperación de la Creación como acto divino y paternal llevara al Señor a insistir: "....Ni llaméis a nadie `Padre' vuestro en la tierra, porque uno solo es vuestro Padre: el del cielo." (Mateo 23:9) Lo que fuera de este contexto parecería una exageración. Sobre todo en consideración a la promesa a sus apóstoles (y por consiguiente a sus sucesores en el celibato) de darles el ciento por uno en hijos (Mateo 19:29 y Marcos 10:30) O sea, que está quitando todo título a la paternidad física para devolverla a lo espiritual, a la paternidad de sus ministros que darían a sus fieles el Pan del Cielo. Si lo que vale del hombre es el alma y la salvación eterna de la misma, es obvio que la paternidad definitiva corresponde a aquellos a quienes facultó para perdonar los pecados (Juan 20:23) y para alimentar a los fieles con su propio Cuerpo y Sangre para llevarlos a la vida eterna. De ahí el título de "Padres" que damos los fieles a los sacerdotes.

Habiendo asentado esto, ya solo nos queda imaginar con lógica cuantas tentaciones pudo poner a Eva, y aún mejor, volvernos a las revelaciones a los grandes místicos como María Valtorta. La tentación de la soberbia y la tentación del placer: "¿Porqué ustedes que son superiores a los animales no pueden tener sus propios hijos como ellos los tienen, sin necesidad de la injerencia de Dios? ¡Observa como disfrutan de sus facultades para tenerlos! Y como los centros del placer están en el cerebro y los órganos sexuales son meros transmisores hacia el cerebro, pudo Eva comenzar a ceder a la lujuria misma guiada por el Diablo."

---¿Y cual podría haber sido la segunda?

---La segunda, que ya degradada y bajo su poder pudiera el Diablo ratificar su obra, por medio de Eva, en Adán. La tercera, que habiendo logrado degradarlos, en sus apetencias comieran del fruto prohibido, sellando así su destino de rebeldía contra Dios y su sujeción al plan del Diablo. Le era obvio que de lograr todo esto Adán y Eva lo habrían tomado a él por guía en vez de a Dios. Habrían dejado el plan de Dios para entrar en el suyo y así, sus hijos lo serían del plan del Diablo. Se requería igualmente que el hombre quedara sujeto a la confusión para dominarlo totalmente, y que esa confusión fuera permanente para asegurarse una descendencia propia en una humanidad perennemente fácil de engañar, y obviamente que el sexo sería la clave de todo el asunto. Pero para remachar, se requería que la ofensa a Dios fuera imperdonable, lo que significaba que tomaran a Dios, el Veraz, por engañador; y a Luzbel, el embustero, por el veraz. Todo esto se lograría si triunfando como seductor lograba que comieran del fruto prohibido.

---¿Y que otra prueba se te ocurre de todo esto?

---La existencia del mal y el principio de la revolución.

---Eso suena interesante.

---Lo es Cuatro Horas. El solo problema de la existencia del mal ha sido tratado por los grandes pensadores de la historia sin excepción. Han fallado muchos y mucho por falta de metodología.

---¿Qué es eso de metodología?

---Cuando vas al cine y llegas a la mitad de la película, ¿te esperas para verla desde el principio o te metes a ver lo que están pasando?

---¡Por supuesto que me espero!

---Esa es la metodología correcta Cuatro Horas. Tampoco comienzas una novela abriendo el libro a la mitad para no entender lo que está pasando. Recuerda todo lo que hemos hablado sobre la importancia de los orígenes y como iniciamos con el libro de Génesis. El método exige comenzar siempre por el principio para entender la trama, para poder seguir la hilazón de los acontecimientos ya que de otra manera te meterías en confusiones de las que no podrías salir. Te sorprenderías, sin embargo, de la cantidad de historiadores que no dan una por no saber comenzar por el principio. ¿Cuándo crees que podrán encontrar la hilazón de los acontecimientos?

---Nunca. Pero, ¿eso que tiene que ver con el mal?

---Que está en el Pecado Original, en el libro del Génesis. El Diablo engaño a Eva con parte de las consecuencias que sobrevendrían por su desobediencia, pero no era necesario que la engañara totalmente, sino que por el contrario, era necesario que no estuviera completamente engañada para incurrir en responsabilidad delante de Dios. Esta es la narración: "Respondió la mujer a la serpiente: «Podemos comer del fruto de los árboles del jardín. Mas del fruto del árbol que está en medio del jardín, ha dicho Dios: No comáis de él, ni lo toquéis, so pena de muerte.» Replicó la serpiente a la mujer: «De ninguna manera moriréis. Es que Dios sabe muy bien que el día en que comiereis de él, se os abrirán los ojos y seréis como dioses, conocedores del bien y del mal.»" (Génesis 3:2-5) Y resulta muy obvio, pequeña Ale Cuatro Horas que el mal está precisamente en obrar contrariamente a Dios, y de esta manera la humanidad conoció el mal haciéndolo suyo para transmitirlo, padecerlo, comunicarlo, y ser su víctima. Es por la sexualidad humana, su raíz hoy más que nunca evidente por la degeneración sexual y el aborto que entró el principio de la revolución, y desde entonces, impulsados por su bestialidad muchos han violado hasta a sus hijas, a sus hermanas, a sus empleadas.

Un momento amigo ¿en dónde entra el aborto en esto?

No solo el aborto, sino desde los anticonceptivos. El mal es un desorden, es la revolución que parte de nuestros bajos instintos para generalizarse, encontrar simpatizantes y destruirlo todo. Ve lo que significa valorar unos minutos de placer sexual sobre la vida de un hijo, lo que ocurre continuamente por medio de los anticonceptivos. Jamás se había degradado tanto el hombre como cuando elige el placer sobre la vida humana que es imagen y semejanza de Dios. Vales tanto menos tu, pequeña Ale Cuatro Horas, que cinco minutos de placer sexual? ¿Qué no te das cuenta que esa revolución de lo más bajo contra lo más valioso es lo que justifica todo aborto como secuela, todo asalto, secuestro, robo y despojo? ¿En donde sino en la sexualidad personal comienza desde temprana edad tanta perversión?

Con tan baja valoración de la persona ¿qué tiene de extraño que impulsados por su bestialidad muchos hayan violado hasta a sus hijas, a sus hermanas, a sus empleadas. A seres indefensos con una brutalidad que ni en las mismas bestias se ve. La rebelión de la bestia contra el hombre espiritual fue la consecuencia de su rebelión contra Dios. Fue el nacimiento de todos los revolucionarios, de todos los agitadores. No solo de Catilina, de Fidel Castro y del Che Guevara, sino de que estos mismos puedan contar con simpatizantes. El mal y el principio de la revolución, fuente de todos los homicidios y perversiones tienen el mismo origen: La tendencia incesante de la bestia interior a apropiarse y dominar nuestras almas. La carne imperiosa contra el espíritu superior. El sexo, arma que diseñara Luzbel y que merecieron en justicia Eva y Adán para hacer esto un valle de lágrimas. Y cualquier agente del Ministerio Público te puede confirmar que si todos los delitos sexuales se denunciaran, ni multiplicando por veinte el número de sus efectivos se darían a basto para tan solo recibir todas las denuncias. ¡El hombre creado a imagen y semejanza de Dios caído al nivel de las bestias y de los demonios. Levantados contra el espíritu ¿qué tiene de extraño que se rebelen contra toda autoridad con las armas en la mano? Levantados en lujuria hasta contra quien más respeto debieran merecerles ¿qué tiene de extraño que se lancen como bestias contra todo lo sagrado, que asesinen a seres indefensos en el seno materno, que se metan de jotos o de lesbianas?

---Pero entonces, ¿por qué lo dejó Dios entrar en el jardín del Edén?

---Porque como señaló Jesucristo Nuestro Señor a María Valtorta, a la larga, el género humano en su conjunto habría sido más soberbio que el mismo Diablo, y hasta más perverso si se pudiera. Más vale dice el dicho una colorada que cien descoloridas. Dios puede sacar bienes de los mismos males, y de grandes males grandes remedios. Piensa en la grandeza de la Redención para Mayor Gloria Suya y de la Santísima Virgen.

---¿Por qué para su mayor gloria?

---Por el número de santos, genios y héroes, y hombres del común vencedores de tanto mal por amor a Él, obedientes a Él, triunfadores con Jesucristo sobre el Demonio, el mundo y la carne.

---¿Por qué de la Santísima Virgen?

---Para que el que por una mujer triunfara, fuera por otra mujer vencido, y no sólo vencido, sino hasta aplastado en su plan, su cabeza. De la misma manera que el que en un árbol triunfó fuera en otro árbol la Cruz vencido por Jesucristo N.S. con su Madre al pie de la Cruz.

---¿Pero que no hubiera sido todo más fácil con sólo impedirle la entrada?

---¿Entonces que significado tendría el libre albedrío? Crear seres libres no era una limitante por sus consecuencias, si conducía a que Dios mismo se cubriera de Gloria siendo Héroe supremo además de Creador Único. No sería menos nuestro Dios de conquistarnos no sólo por su omnipotencia sino sobre todo por nuestra gratitud, por su exceso de misericordia para cubrir nuestras imperfecciones evidentes por el Pecado Original. En resumen: por ser más "Emmanuel" que significa Dios con nosotros, lo contrario a ser solo el distante Dios Creador de los filósofos. Dios con nosotros en la Eucaristía como alimento, nuestro nuevo Paraíso.

---¿Pero Satanás se ganó una descendencia?

---¿Todavía lo dudas, a pesar de todos los desbarajustes sexuales, homicidios, guerras y revoluciones que propician sus partidarios? Así lo afirma el mismo Dios en Génesis 3:15. Recuerda la importancia de las limitaciones y de los orígenes. Por haberse dado todo esto desde el principio toda la humanidad es pecadora, pero también por ello Jesucristo N.S. es el Redentor de TODA la humanidad. El Héroe Supremo de toda ella, y la Santísima Virgen es la Heroína Suprema. La Mujer sin la cual nada bueno habría en el mundo, Ella es la obra suprema de la Creación entera.

---¡Pero todavía no entiendo que tiene que ver el sexo para que haya confusión!

---El asunto no parece difícil, Cuatrohoras. ¿Recuerdas como comenzamos estas cartas?

---Sí, por supuesto. Con la existencia del alma por la sustracción del cadáver.

---Pues ahora sólo tienes que concentrarte en el alma, no al término, sino al principio.

---¿En el nacimiento del niño?

---¡No Cuatro Horas! En el acto sexual. ¡Dije al principio!

---Tu debes tener una obsesión por lo sexual. Debes saber que hay infinitud de actos sexuales sin frutos. ¡Y no me refiero a anticonceptivos!

---Y ahora la obsesionada pareces ser tú. Nunca dije en TODOS los actos sexuales, dije en el principio, en EL acto sexual. O qué, ¿te trajo a ti la cigüeña Cuatrohoras?

---No.

---¿A los clientes de tu restorancito? ¿A quién conoces que haya traído la cigüeña Cuatrohoras?

---A Birla.

---¿Cómo que a Birla, Cuatrohoras?

---Es que ella cree en la reencarnación.

---¡Pues aunque crea en el zopilote cuadrado! Sin acto sexual no hay vida Cuatro horas. Por eso te pedí, después de tanto hablarte de la importancia de los principios, que te concentres en el alma al principio de la vida. En el mismo acto sexual.

---¿Y eso cómo se hace?

---Recuerda que te expliqué, pequeña Ale Cuatrohoras, cuando me pedías que hablara de cuerpos y no de cadáveres para entender lo que es el alma ¡que no se podía!. Y no se puede por que los actos son del conjunto. Y el conjunto es un cuerpo animado por un principio rector de cuanto hace... Y la prueba está en el cadáver que falto de esa dirigencia se pudre.

---¿Me quieres decir que el alma está ahí desde el principio y como dirigente del desarrollo del feto?

---Hemos hablado todo el tiempo de la importancia de los principios, de la diferencia entre la plenitud y las carencias en los principios de todo. No hay individuo sin alma, Cuatrohoras. Pero digamos mejor como co-dirigente, ya que nada puede sostenerse en la existencia sin Dios. Así podemos hablar mejor de co-existentes en vez de andar presumiendo de existentes estando tan faltos de sustento de no ser por todos los dones que nos rodean. Toma nota de que, de estar ahí el alma desde el principio como co-directora de la evolución del feto, se podría explicar un gran misterio. El óvulo es rodeado en un momento dado por varios espermatozoides, pero se abre a tan sólo uno de ellos. ¿Por qué a ese y no a otro? ¿Y qué explica a los cuates, triates, etc.? Pareciera que el óvulo fuera capaz de elegir al más interesante de sus pretendientes, el sexo en el que militaría en este mundo, y varias almas en conjunción de voluntades con Dios, ¡hasta nacer simultáneamente como quintillizos!

---¡Pero todavía no entiendo lo de la confusión!

---Para allá vamos Cuatrohoras. Parte de la base de que todo principio tiene que estar completo en lo esencial. Y lo más esencial, lo fundamental, es el alma que, como hemos visto, no puede ser un mero agregado; el uno, o el diez por ciento, sino la verdadera totalidad de nuestras vidas. Auxiliada, eso si, por un cuerpo que puede ser sacrificado a fines tan altos como la virginidad y la castidad; haciendo uso el hombre tan solo de las funciones primarias para su verdadero desarrollo espiritual. Por lo tanto el alma no es fruto de los padres que lejos de aportar el alma contribuyen tan solo con óvulo y espermatozoide, lo que nos refiere de nuevo a Dios creador. Tu misma lo has señalado con suficiente precisión cuando me dijiste: "Debes saber que hay infinitud de actos sexuales sin frutos." Como el solo acto sexual no puede producir almas, y los efectos no pueden superar a las causas ¿recuerdas la bolsa de la que no podías sacar más de lo que hubiera en ella y todo lo que vimos sobre la evolución? es Dios mismo creando el alma, toda alma, en cada acto sexual por Él destinado a la vida.

Ahora bien, imagínate al alma en el momento de su creación contemplando a Dios, Orden y Belleza sin límites quedando impresionada por esas perfecciones. ¡Que belleza de alma! Imagínatela ahora teniendo que pasar por esa barrera del acto sexual con diversos contenidos, la fuerza y pasión animal que se le sobreimprime. Toma el equivalente en la fotografía de una belleza a la que se le sobre imprime el negativo de un chango. Por mucho que mejore el chango... ¡Pobre belleza! Así queda el alma dependiendo del grado de virtud o bestialidad de los padres con la sobreposición de tal confusión. ¡Con que pérdida de nitidez y espiritualidad! Fruto del Pecado Original en su actualización por el acto sexual, renovación del abestiamiento de Eva y su cómplice Adán.

Como prueba, después del pecado no sólo corren a ocultarse de Dios, sino que viendo que estaban desnudos se hacen unos taparrabos con hojas. Y Dios mismo confirma su necesidad mejorándoselos con unos de piel de animal. Parece obvio, que de haber estado sexuados lo que se habrían tapado delante de Dios era la cara de vergüenza, y no las partes debidas al mismo Dios antes de merecer el castigo. Casi máscaras en vez de taparrabos. Por lo demás, ¿quién podrá dudarlo cuando es hasta el principio del capítulo siguiente del Génesis, el cuarto, en que se dice "Conoció el hombre a Eva, su mujer, la cual concibió y dio a luz a Caín..." O sea que fue hasta entonces y como consecuencia del Pecado Original.

¿De donde sacaste todo eso?

---La Sagrada Escritura es clara al respecto. Del pueblo de Dios, elige el Señor para Sí a los primogénitos, o a los hijos de la ancianidad como a José, hijo de Jacob, y los grandes elegidos como Isaac, Samuel y Sansón, primogénitos e hijos de la ancianidad. En los primeros, porque hay en las parejas sanas más deseos del hijo y de hallarse fértiles que del placer. La promesa mesiánica que tan singular valor daba a la descendencia acentuaba el hecho y con el la virtud. Las conclusiones van saliendo con la ayuda de los escritos de místicos con los que Jesús se ha comunicado, como María Valtorta, aunque no recuerdo la cita, pero de ahí viene la palabra barrera al referirse a como contraen las almas el Pecado Original. Lee, además, el Libro de Tobías en la única versión de la Biblia que lo conserva íntegro: La Vulgata de San Jerónimo en esas Biblias grandotas que dicen "Sagrada Biblia, traducción de la Vulgata Latina, Editorial Católica". Ahí están las instrucciones del ángel Rafael a Tobías diciéndole sobre quienes tiene poder el Demonio: sobre aquellos que olvidando a Dios, y lo sagrado de la procreación, se aparean como la mula y el mulo. Figura perenne de aquellos a quienes la descendencia les importa un bledo, ya que de mulos no hay críos. Además está la historia moderna de la física. Es convicción de todos que físico que no ha producido nada significativo antes de los 26 no lo hará jamás. La formación intelectual exige castidad para rendir frutos. Como verás, los hombres también se dividen según la pureza con que fueron engendrados, y por la pureza y castidad en que viven la época más difícil, su adolescencia y los años inmediatamente posteriores. Los sacramentos con su poder restaurador deben darse todos sin pérdida de tiempo.

---¿Pero sin sexo cómo nos habríamos reproducido? El sexo es la fuerza, el vigor necesario.

---Si Cuatro Horas, tú lo has dicho. Pero ahora dime: ¿Es la única fuerza que conoces? Dios, presente en el Paraíso no podía haber suplido con la fuerza del amor en vez de que estuviéramos sujetos a una pasión bestial, tantas veces criminal, y siempre violenta? ¿Acaso el amor no tiene fuerza hasta para domeñar al sexo? Un hombre enamorado ¿No es acaso el primero en respetar por ese mismo amor a una mujer? El amor triunfa siempre Cuatrohoras, y el abestiamiento señala la falta de amor. El hombre es más hombre por amar más, y menos hombre por ser más bestia. Todos los problemas se suscitaron por haber tomado Adán y Eva al Diablo por guía...

---¿Por eso es necesario bautizar a todo niño de inmediato?

---Sí, para que vuelva Dios a restaurar el alma a su gracia, o sea, a restablecer su influencia sobre ella para irla reedificando. El tiempo Cuatro Horas. El valor del tiempo. La claridad espiritual nos es devuelta por el bautismo. Si permaneciéramos castos la conservaríamos, ¡y como creceríamos en ella como hijos de Dios!

---¿Pero entonces porqué no conservamos la claridad intelectual de Adán y Eva en el Paraíso?

---Dije restaurar el alma, no el cuerpo. El lastre bestial, y la muerte corporal son parte de la condena, la parte irremisible por elección de Adán y Eva como podrás leer en el libro de Génesis: El demonio le dijo a Eva: "Bien sabe Dios que no moriréis". La muerte es la prueba de la veracidad de Dios y señalamiento de quien es el único embustero. La gran lección quedaría grabada en la inevitabilidad de la muerte. De ahí la necesidad de renacer del agua y del espíritu, y la necesidad de los sacramentos para actualizar sus beneficios, y de la necesidad de su continua fuerza reparadora. En resumen: reparar y restaurar; restaurar y reparar continuamente para poder avanzar.

---Me gustaría que además de claridad espiritual pudiera haber claridad intelectual.

---Pruebas hay de una correlación Cuatro Horas. De entre varias, recuerdo la del santo cura de Ars, don José María Vianey. Era tonto. Para que pudiera ser ordenado, la única razón que acepto el obispo ante tanta limitación fue la que le dio el superior del seminario: "¡Si viera usted con cuanta devoción reza el rosario!" Sería ordenado. Pero para que no avergonzara se le envió a un pueblito en las montañas tan insignificante como él: Ars. Resultó que ese pueblito era un desastre moral que no sólo regeneró, sino que a la vuelta de los años iban a consultarle hasta allá sus problemas los más altos dignatarios de la iglesia, y también otras gentes importantes.

---¿A ese tonto?

---¡Porque dejó de serlo!

---Nunca había oído de un tonto que dejara de serlo, y menos a ese grado...

---Te olvidas de la Gracia Santificante, Cuatro Horas. Por ella llegamos a participar de la inteligencia divina desde esta misma vida.

---Pero yo sigo creyendo sólo en mi trabajo, y en lo que puedo hacer con mis manos...

---¿Qué hacer contigo, Cuatrohoras, que de tal manera te niegas al saber y al amor?...

---Mmm... Lo pensaré...

---Espero que esta vez lo digas en serio...

Sexta carta a la pequeña Ale Cuatro Horas.

Sábado, 15 de Marzo de 2003

Querida Alejandra:

¿Por qué seremos tan difíciles cuando se trata de las cosas de Dios? Me has dicho que sólo crees en tu trabajo y lo que puedes hacer con tus manos, lo cual me llena de tristeza. Pero lejos de tirar el arpa encuentro más necesario seguirme dirigiendo a mi pequeña Ale Cuatro Horas. Y la razón es muy sencilla: hay muchas pequeñas "Ale Cuatro Horas" en este mundo en que vivimos que no han tenido la fortuna que tuve yo desde que nací de ser dotado de las magnas riquezas, de las incomparables riquezas de la fe católica. Y esto me hace más responsable delante de Dios de seguirte buscando.

Hay una terrible confusión moderna derivada de una multiplicidad de creencias, llamémosle sectas, que quitan toda seriedad a lo más serio del mundo: nuestro encuentro directo con la verdad misma que es Dios y sus riquezas. Quisiera explicarte esto tomando de nuevo como ejemplo tu pequeño restaurante. ¿Qué me dirías, pequeña Ale Cuatro Horas, de que tu cocinera comenzara por quitar la sal totalmente a los platillos? ¿Qué me dirías de que después quitara el resto de los condimentos? ¡Por supuesto que no te daría igual! ¿No es así? ¿Qué me dirías de que embravecida tu cocinera siguiera adelante bajando la calidad de todos los ingredientes? ¡Por supuesto que no te daría igual que te llevará la quiebra! ¿O sí?

Pero esto que entiendes con tanta facilidad tratándose de lo que haces con tus manos, o más bien dicho, tu cocinera en lugar tuyo, no pareces muy capaz de entenderlo cuando se trata de tu inteligencia y de tu formación personal… Y sin embargo es igual de sencillo. Cada una de estas cartas que te dirijo tiene esa intención, de enseñarte como en el mundo de las ideas, de las creencias y de la fe, todas las sectas heréticas no son más que disminuciones equivalentes a las realizadas por tu cocinera en el párrafo anterior. Quiebre tu negocio ¡pero jamás tu existencia! Pierde el mundo ¡pero no tu alma! ¿Y qué es el alma? Ya lo vimos pequeña Ale Cuatro Horas desde la primera carta que te envíe, y también en el último diálogo que tuvimos.

¿Por qué no la vemos? La respuesta es muy sencilla para cualquiera que tenga medianos conocimientos de física. La realidad es que vemos el universo a través de una rendija diminuta. De todo el espectro electromagnético que abarca desde ondas extremadamente largas medibles en kilómetros, hasta diminutas de millonésimas de centímetro de longitud de onda. Pero, lo que llamamos luz, lo único que podemos percibir por nuestros ojos son tan solo tres diez milésimas de centímetro de longitud de onda. Entre el rojo y el violeta, entre cuatro diezmilésimas y siete diezmilésimas de centímetro de longitud de onda. No podemos percibir directamente ni el infrarrojo ni el ultravioleta. ¡Lo raro sería que viéramos el alma! Lo raro sería que pudiéramos ver a los ángeles, a los demonios, con tan escasa capacidad de visión. Es muy probable que uno de los efectos inmediatos del Pecado Original fuera precisamente esa reducción en la visión conducente a la pérdida de control sobre la naturaleza. Prueba de esto está en que en tu pequeño restaurante, en tu casa o en cualquier lugar en que te encuentres no puedes ver directamente ningún canal de televisión y las ondas de los celulares o de las estaciones de radio. Pero de que están en todas partes no cabe la menor duda. Basta para comprobarlo encender una televisión, un aparato radio, o tu celular. Como verás lo invisible es perfectamente real, y todo esto sin tener que adentrarnos a lo descubierto sin nuestros sentidos como lo es el átomo y las partículas subatómicas. Lo invisible siempre ha existido, la ciencia justifica la fe para sorpresa de los incrédulos.

Fíjate bien como la ciencia refuerza el monoteísmo. Ha sido solo en el occidente cristiano donde la ciencia ha alcanzado las cúspides más elevadas. La intuición fundamental de la ciencia en todos sus exponentes ha sido la existencia de un solo Dios. De no ser por esto, no podríamos buscar la verdad única en todas las cosas y en todas las ciencias. Considera por un momento lo que sería un universo con muchos dioses al estilo pagano. ¿Qué verdad sólida y permanente quedaría si lo que un dios creara otro lo modificara. Como verás tendríamos la anarquía y con ella la imposibilidad de toda ciencia. Un paso mayor hacia la anarquía sería el ateísmo o negación de toda inteligencia creadora y gobernante del universo. En otras palabras: lo primero que la ciencia afirma por el solo hecho de existir ―y en refutación de los embusteros― qué engañan con mitos científicos ateos, es la existencia de un solo Dios, sin el cual, hasta el intento científico sería absurdo.

Más valen palabras duras a tiempo que lo irremediable. ¡Así que agárrate Cuatro Horas! Por que me recuerdas en tu pose intelectual a un fulano que me tope en el metro que presumía de ateo por universitario. Decía que él solo creía en lo que le daba de comer. Con mucha pena, y públicamente, me vi obligado a informarle que en lo mismo "creían" los cerdos, y sin necesidad de ir a la universidad. Ante su descontrol, le pregunté que en quien confiaba. "En mi mismo", respondió con soberbia. ¡Pero en que poquita cosa confía! le dije; porque dígame, ¿puede empeñar su palabra de que estará vivo dentro de cinco minutos? ¡Empéñela públicamente! No puedo, me dijo. Se lo bajo a cuatro minutos. ¾ ¿Puede? ¡No puedo! Se lo dejo en tres. ¿Puede? ¡¡No puedo!! ¿Ya ve en que poquita cosa confiaba? Recordemos que tenemos que morir. ¡Bienaventurados los que mueren en el Señor!

O en otras palabras, y como dice la Sagrada Escritura: Maldito sea el hombre que confía en el hombre ---y peor de maldito el que confía en sí mismo, en ese “yo” que es el único con poder para degradarlo, para convertirlo en una vergüenza, ¡para destruirlo! ¡Bendito más bien aquel que confía en el Señor su Dios!

Pero recuerda sobre todo mi querida pequeña Ale Cuatro Horas, que ese Dios único es Trino como ya vimos en mi carta anterior. Ahora fíjate bien en lo que te voy a decir: Dios no es "como una familia", tampoco como se reza heréticamente hoy día el Credo al referirse al Hijo "de la misma naturaleza que el Padre" sino "consubstancial" al Padre como ya te explique anteriormente. En resumen: No basta con señalarlo como de la misma naturaleza, lo que es obvio; ya que lo único que no puede dejar de transmitir la paternidad es la naturaleza propia del padre; sino que lo importante es LA UNIDAD por la consubstancialidad. En otras palabras: “consubstancial” además de implicar ser de la misma naturaleza exige la unidad excluyendo toda posibilidad de dualidad ¾Dios es uno. Hay un solo Dios. Esto es muy importante, tan importante como la verdad, y no hay nada más importante que la verdad, porque solo la verdad nos hará libres (Juan 8:32).

Pero para entender por qué Dios no es como una familia, que entre nosotros está compuesta por un padre, una madre, y al menos un hijo, seres diferenciados físicamente, sino un Individuo perfectamente singularizado como lo eres tú, o como lo soy yo, pero infinito, tendremos que adentrarnos en los misterios del alma humana. En esa alma de la que hemos hablado tanto sin que siquiera la podamos ver, teniendo que apelar a la resta de un cadáver para poder constatar su existencia. Porque verás, pequeña Ale Cuatro Horas, la Trinidad está en el espíritu del hombre creado a imagen y semejanza de Dios. Esto consta desde el libro de Génesis en el cual, para la creación de Adán Dios habla en plural diciendo: "Creemos al hombre a imagen y semejanza nuestra" (Génesis 1: 26) es por esto que la creación de Eva se distingue con la metáfora “clonística diferenciada” de la "costilla" de Adán. Pero para no dejar dudas vamos a apelar de nuevo a la ciencia moderna.

Aparecieron recientemente evidencias formidables sobre la pluralidad de personas, de hecho, sobre una trinidad de personas dentro de un mismo ser humano. Por anatomía sabemos que el cerebro humano tiene una clara división en dos hemisferios, uno del lado izquierdo y otro del lado derecho.

Sabemos igualmente que estos se hallan cruzados: el hemisferio izquierdo controla el lado derecho del individuo, y el hemisferio derecho controla su lado izquierdo. Este órgano misterioso reservaba sus mayores sorpresas a neurólogos y cirujanos. Los enfermos que padecían de un tipo de epilepsia severa orillaron a neurocirujanos a cortar el cuerpo calloso que se encuentra uniendo ambos hemisferios debajo de la partición visible, lugar que interconecta las terminaciones nerviosas de ambos lados del cuerpo humano con sus respectivos hemisferios cerebrales. Valorar los resultados del desastre anatómico condujo a una sorpresa mayor: los dos hemisferios, al ser desconectados respondían como dos personas completamente diferentes y se narra el caso de un sujeto experimental de que se dan las iniciales P.S. que en el terreno vocacional, la persona que habitaba el hemisferio izquierdo deseaba ser un dibujante (oficio tranquilo) y la persona que habitaba el otro anhelaba ser corredor de autos de carreras (oficio riesgoso si los hay). Este caso ampliamente difundido por Donald Wilson y colegas el año de 1977 interesó no solo a neurocirujanos y filósofos, sino también a una de las grandes figuras de la cosmología de nuestros tiempos, el señor Roger Penrose quien lo cita en su "La Nueva Mente del Emperador, lo relacionado con computadoras, mentes, y las leyes de la física", en su capítulo 9 y bajo el rubro “experimentos con cerebros seccionados”. Asunto que nos confirma no solo personas distintas, sino personalidades opuestas por su radical diferenciación, lo que buscábamos encontrar conforme al modelo trinitario planteado por la teología católica de tres Personas absolutamente diferenciadas como corresponde a su gran Personalidad, Infinita Personalidad en la Divinidad, pero iguales en la dignidad y en la majestad. El cruzamiento funcional de los nervios a través del cuerpo calloso nos habla fuertemente de la cruz y, como veremos más adelante, del Espíritu Santo, unión amorosa, infinita y perfecta entre el Padre y el Hijo. Recordatorio de que todo cuanto existe, la aseidad misma, El Infinito, no es mas que el Romance entre un Padre y su Hijo, y que ese mismo romance debe trasladarse a toda alma humana, al padre interior, y al hijo interior. Veremos esto con más detalle posteriormente, pero anticipemos la razón del alma trinitaria tomando del evangelio: "Jesús le respondió: «Si alguno me ama, guardará mi Palabra, y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada en él... (Juan 14: 23)"

Como verás pequeña, el alma trinitaria, tu alma, fue creada para ser habitada. Una sola alma trinitaria para un solo Dios trinitario. Habitados por Él y siendo uno con Él lo podemos todo. Al hecho de ser habitados por Él le llamamos estar en estado de gracia. Y podemos entender que el hombre en estado de gracia sea tan solo poquito inferior a Dios mismo. De ahí el reproche continuo de Jesucristo en el evangelio: "Hombres de poca fe". Y, por ejemplo: “Díceles: «Por vuestra poca fe. Porque yo os aseguro: si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte:"Desplázate de aquí allá", y se desplazará, y nada os será imposible.» ( Mateo 17:20)". ¿Empiezas ya, pequeña Ale Cuatro Horas, a comprender la diferencia infinita entre confiar en tus pequeñas manos y confiar en Dios? ¡Dime que tan grande es tu Dios y te diré que tan grande eres tú! Porque si tu Dios se reduce a tus pequeñas manos... ¡Pobre Cuatro Horas!

¡Qué infinita diferencia entre lo que pueden hacer tus pequeñas manos y lo que puede hacer el Creador del universo! Pero de ti depende Cuatro Horas, porque tan solo para comenzar, amor con amor se paga. Y el Infierno mismo es el fuego del infinito amor despechado.

Me despido de ti con el cariño de siempre en la esperanza de tu sí al Padre...


SEXTO DIÁLOGO CON LA PEQUEÑA ALE CUATRO HORAS

¿ Has podido dormir más de cuatro horas Alejandra?

---Ni me hables. Podrás burlarte cuanto quieras de mis pequeñas manos, pero debes saber que con ellas hago los más deliciosos platillos...

---Nunca me he burlado, pequeña Ale Cuatro Horas, y siempre he sido el primero en elogiar tus platillos. El peligro está en que no pases de tus habilidades culinarias por endiosarte con ellas, y mucho me temo que se halle ahí la raíz de tus problemas. Recuerda que una vez te dije dime que tan grande es tu Dios, y te diré que tan grande eres tú.

---¿Y si no tengo Dios?

---La naturaleza aborrece un vacío ¾dice el dicho¾ de manera que los que niegan a Dios es para ponerse en Su lugar... O por lo menos a sus manitas. Bastante ridículo a estas alturas, ¿no crees?

---No creo... Y tampoco te entiendo... Para comenzar haces demasiado énfasis en tus citas bíblicas ¿Porqué das tanta importancia a ese: "Creemos al hombre a imagen y semejanza nuestra" (Génesis 1: 26).

---Porque “creemos” es plural, lo que “nuestra” confirma sin lugar a dudas.

---¿Y eso qué?

---Pues simplemente que hay varias personas en Dios, y en el hombre creado a su imagen y semejanza también, lo que los rabinos niegan en perjuicio de sus infelices seguidores a los que traen de boinita y marchando para sus fines después de haberlos despojado de la realidad más sublime, profunda y práctica; tanto por lo que a Dios se refiere, como por lo que se refiere a la verdadera naturaleza de todo hombre.

---¿También práctica?

---¡Por supuesto, Cuatro Horas! Imagínate lo que es hablar de alguien importante sin saber ni lo más elemental respecto a él. Y, ¿quién como Dios Cuatro Horas?

---Bueno, de ahí no te voy a sacar. Pero lo de la misma naturaleza del Padre no me parece objetable. Es hasta de sentido común que padres e hijos tengan que ser de la misma naturaleza, por tanto tachar eso de herejía, lo que hasta suena feo, tiene que ser una exageración tuya.


---Tu misma lo señalas, Cuatro Horas. Los padres e hijos tienen que ser de la misma naturaleza en todos los casos, por consiguiente, no hay misterio alguno en ello. Lo único que están echando en el olvido ¾y me temo que algunos con mala intención¾ es que estamos hablando del Misterio de la Santísima Trinidad. Como te dije en mi cuarta carta: “Pero resulta igualmente evidente por las diferencias: que el Padre amantísimo, al engendrar a su Hijo igual a Él y perfecto como Él solo podría engendrarlo en y de Sí mismo. Esto a diferencia de ti, pequeña Ale Cuatro Horas, que cuando engendraste a tu hijo pudiste y tuviste que apelar a alimentos externos para que se fuera formando dentro de ti, lo que hizo del conjunto madre-hijo dos individuos perfectamente diferenciados y separados. Dios, por razones obvias al engendrar a su Hijo como Persona siguió siendo un solo Individuo. En otras palabras siendo Dios el único existente, el Padre engendró una Persona perfectamente diferenciada pero dentro de su misma, única, simplísima, e indivisible naturaleza divina”.

---Bueno, tiene lógica ¿pero tiene importancia?

---Mira Cuatro Horas, tiene tanta importancia, que sustituir el término correcto y tradicional de consubstancial por el “de la misma naturaleza” es poner a Dios a la altura de quienes tu misma acabas de mencionar, de cualquiera, incluyéndote a ti y a tu hijo. Son de la misma naturaleza ¿pero son UNO? ¡Ni metiéndolos a los dos en una licuadora! Ahora entenderás la importancia del asunto con sólo recordar este párrafo de mi última carta: “La intuición fundamental de la ciencia en todos sus exponentes ha sido la existencia de un solo Dios. De no ser por esto, no podríamos buscar la verdad única en todas las cosas y en todas las ciencias. Considera por un momento lo que sería un universo con muchos dioses al estilo pagano. ¿Qué verdad sólida y permanente quedaría si lo que un dios creara otro lo modificara. Como verás tendríamos la anarquía y con ella la imposibilidad de toda ciencia. Un paso mayor hacia la anarquía sería aumentar incesantemente el número de dioses hasta una anarquía total equivalente a ningún orden y ningún dios ordenador, lo equivalente al ateísmo o negación de toda inteligencia creadora y gobernante del universo. En otras palabras: Lo primero que la ciencia afirma por el solo hecho de existir ---y en refutación de los embusteros--- qué engañan con mitos científicos ateos, es la existencia de un solo Dios, sin el cual, hasta el intento científico sería absurdo”. Por consiguiente Cuatro Horas, negar la consustancialidad no es ni siquiera politeísmo. Es mucho más que eso, es negar que Jesucristo sea Dios y que el Padre mismo lo sea. Todo esto huele a rabinato judío dentro de las más altas esferas de la Iglesia.

---¿Y que hacen ahí?

---Combatir al Señor del único modo eficaz para echar fuera a los fieles por medio del escándalo. Y de todos los escándalos ninguno ha sido más grave que este.

---¿Y porqué lo permite Dios?

---Para manifestar de nuevo su omnipotencia como ya lo hizo en el año setenta cuando por su rechazo a Cristo destruyó el templo y aniquiló casi totalmente a los judíos. Y les repitió la dosis el año 135 cuando también, por medio de los ejércitos de Roma, los dejó casi extintos. Eligieron el puesto de prepotencia armada que el Faraón ejercía en tiempos de Moisés, correrán la suerte del Faraón como ya la corrieron en los años setenta, y en el ciento treinta y cinco de la Era Cristiana. Recuerda como los sentenció Jesús en el Evangelio: Se airó el rey y, enviando sus tropas, dio muerte a aquellos homicidas y prendió fuego a su ciudad. (Mateo 22:7)

---¿Y si se arrepienten?

---Los juicios son de Dios, Cuatro Horas. Ni tuyos ni míos, pero el Apocalipsis es tremendo y se tiene que cumplir... ¡Dios reconocerá a los suyos!

---Mejor me voy a dormir...

---Que sueñes con los angelitos Cuatro Horas...




Séptima carta a la pequeña Ale Cuatro Horas.

Domingo, 2 de junio de 2007

Linda Cuatroras:


En mi carta anterior vimos nuevas evidencias científicas relativas a la pluralidad de personas en la mente del hombre como ya podían percibirse al cortar las conexiones entre ambos hemisferios cerebrales. Para rematar, veremos ahora la confirmación de estos hechos en el terreno propio de la psicología humana, para de esta forma cumplirte mi promesa de desbancar a esos brujos modernos que navegan con título de psicólogos y psiquiatras.

Partamos del hecho consignado en mi cuarta carta de la suprema sencillez de Dios. Habíamos dicho: Deus simplisimus est. Lo mismo tenemos que afirmar del alma humana: Anima simplisima est. Y de hecho, como veremos, el alma no podría ser más sencilla en su naturaleza verdadera, en su naturaleza trinitaria.

Para presentar el alma humana nos bastaría con el alma de cualquiera: podríamos por ejemplo tomar algún apellido común como Gutiérrez, Pérez o Sánchez. Como da lo mismo te ofrezco Pérez, con la aclaración de que puedes sustituir tu propio apellido como podrá igualmente hacerlo cualquiera.

Pérez, Pérez y Pérez.


Analicemos el caso partiendo de un ser humano cualquiera, nuestro común denominador, y llamémosle Pérez. Hemos afirmado que, por haber sido creado a imagen y semejanza de Dios Pérez es trinitario, con minúsculas. Lo único que tenemos que recordar es que a diferencia de la Santísima Trinidad, la trinidad de Pérez ha sido víctima del Pecado Original. Pero esta diferencia nos permite --vaya cosa curiosa-- constatar con mayor facilidad la división trinitaria del alma de Pérez al haber oposición entre las personas.

Al dirigirnos a Pérez no dejamos lugar a distingos, aparentemente, entre Pérez padre, Pérez hijo, y el espíritu o voluntad de Pérez.

Pero resulta que Pérez tiene una conciencia. Pérez tiene un legislador interno que le dice que está bien, y que está mal: Ésta persona es Pérez “padre”.

Y, sin lugar a dudas, Pérez tiene un juez interno: Pérez “hijo”; y para colmos ¡este juez es bastante corrupto! Un juez capaz de invertir los valores rechazando la voz de su conciencia padre. Un juez capaz de disculpar otra copa, otro cigarrillo, o algo más grave.

Y Pérez, sin lugar a dudas, tiene un ejecutivo. Ejecutivo impulsado por el juez venal de Pérez a tomarse otra copa; y, en una de esas, a matar a su suegra.

La voluntad tiende indefectiblemente hacia el bien, pero su valoración correcta depende de que Pérez juez no obre como juez venal.

Esta trinidad de Pérez explica la libertad moral humana que el animal no tiene. La capacidad de una persona interior para juzgar a favor o en contra de otra; de su conciencia, y de actuar en consecuencia.

Cuando nos dirigimos a Pérez

Cuando nos dirigimos a un tercero lo hacemos con decisión, en general como si no hubiera conflicto interior. Así, cuando hay recta intención nos dirigimos a Pérez padre al pedirle consejo. A Pérez hijo cuando solicitamos de su buen juicio la aprobación; y, al espíritu de Pérez cuando solicitamos su ayuda. Y viceversa cuando 'Pérez' se dirige a nosotros. O mejor dicho, seríamos concientes de hacerlo así, si tuviéramos una conciencia clara de la naturaleza tripersonal de cada individuo.

Nos dirigimos a Pérez padre cuando hablamos a nombre de la ley y del bien común en forma general, como refuerzo. A Pérez hijo cuando aprobamos o desaprobamos sus ideas; y al espíritu de Pérez cuando le ayudamos colaborando con él, o cuando de plano le rechazamos.

Por supuesto que no somos muy conscientes de todo esto cuando actuamos. Pudiera parecer hasta superfluo; ya que después de todo, Pérez es un individuo. Para todos los efectos, Pérez sigue siendo Pérez, ...aparentemente.

Pérez vs. Pérez vs. Pérez

Para entender mejor la trinidad que Pérez es, nos basta con el caso del alcohólico (o del placer enviciante en general: placer intenso). Por la rebeldía del juez de Pérez, imponiendo un juicio contrario a su conciencia, y ejecutado, copa tras copa por la voluntad o espíritu de Pérez; Pérez ya no es Pérez, es Pérez contra Pérez.

La ecuación trinitaria de la armonía interna de la que depende que Pérez ame a Pérez, se ha vuelto contradicción.

El amor se ha vuelto odio y desprecio. Pérez está odiando a Pérez. Su juez quiere la aniquilación de su legislador. El legislador la conversión de su juez que equivale a destruir sus vicios, sus juicios contra derecho. El legislador quiere el orden jurídico. El judicial la destrucción de ese orden por jurisprudencia vicio.

Lo que esto llega a hacer con el ejecutivo o voluntad de Pérez deja un legado estadístico de vidas desperdiciadas, hogares destruidos, hijos maltratados, accidentes automovilísticos y, caso extremo, suicidios. Nada extraño... en el momento que Pérez dejó de ser trinidad en la igualdad del amor, Pérez dejó de ser Pérez... Pérez, en cuanto Pérez, se suicidó. Lo fundamental resultó ser... ¡La trinidad de Pérez!

El buen juicio de Pérez dejó de ser buen juicio en su rebeldía. En su vicio, el juicio hijo dejo de decir de la conciencia padre: "Todo lo del padre es mío (Juan 16:15)". Dijo exactamente lo contrario: "nada de mi conciencia padre es mío" . Lo dijo ejecutivamente, voluntariamente, copa tras copa: "nada quiero yo tener que ver con mí conciencia padre". Ejecutivamente se odió (el valor de las obras), odiándose se negó, y negándose se suicido.

El misterio de La Santísima Trinidad es un misterio no solo en Dios, lo es en el hombre mismo. Es el misterio del alma humana, trinitaria desde su creación. Negarlo es negar el libro del Génesis, es herejía. Lo extraordinario por tanto no es que Dios sea Uno por razón de su Santísima Trinidad, la perfección infinita exige esa armonía Lo extraordinario es que Pérez sea uno a pesar del Pecado Original. ¡Qué lo seamos los mortales comunes! ¡Que sigamos considerando uno --sin más-- a Pérez vs. Pérez vs. Pérez!

Pérez ha perdido, por el uso incorrecto de su capacidad de elección su libertad y el amor y cariño que se debe a sí mismo. Se encuentra internamente amarrado en la contradicción de sus dos primeras personas que le impide movilizarse a unísono. Peor aún, está destruyendo por sus juicios la fuerza de su conciencia padre.

La consecuencia es que Pérez ha quedado maniatado externamente por el alcohol. A la atadura interna corresponde la atadura externa.

La atadura interna es peor que la externa, porque la primera siempre implica la segunda; por el contrario, la prisión y el cadalso por razón de la justicia han forjado héroes y santos. ¡Los libres entre los libres! ¡Los libres de la corrupción y del temor!

¡Corromper es mil veces peor que oprimir! ¡Es esclavizar por dentro!

Una alma indivisa, la de Pérez. Tres personas distintas en el alma indivisa de Pérez. La posibilidad para el desarrollo de la personalidad de Pérez del desarrollo armónico de las tres.

Posibilidad que solo puede darse por el reconocimiento en el análisis y la introspección, y...por el arrepentimiento.

El arrepentimiento es la corrección del juicio. Restauración de la armonía.

Las tres personas coexisten simultáneamente con memoria, entendimiento y voluntad propias, en armonía o en conflicto. Las tres hacen oír su voz en los grandes momentos: la voz de la conciencia es proverbial, su voluntad exigencia, su exigencia, imperiosa.

El juez hace, en la virtud, oír su voz publica y privadamente a favor de la ley. El juez venal pretende componendas hasta "consigo mismo" como se dice vulgarmente; de hecho no es consigo mismo, como hemos visto, sino con su legislador o conciencia: "una copa más y será la última."

La voz del juez venal es la rebeldía y el auto engaño. La voz del espíritu es el pensamiento voluntario, la palabra o la obra, conjunción o sentencia del juez con la Santísima Trinidad; o fallo del juez en conjunción con el Espíritu del Mal, del odio y de la contradicción o mentira. Ésta es el alma del hombre. Pero fíjate bien en lo que sigue pequeña Ale Cuatro Horas, porque muchos te habrán de decir que si las cosas son tan sencillas ¿por qué andamos tan confundidos? Y la respuesta es muy obvia ya que cada vez que violamos la integridad de nuestra consciencia padre estamos erigiendo jurisprudencialmente una personalidad propia y contraria a nuestra conciencia padre, ahí donde pudimos haber erigido una conciencia propia y acorde con nuestra conciencia padre propia de los hijos de Dios.

En efecto, ese es el camino por el cual nos vamos distanciando como el Hijo Pródigo de la casa del padre. Veamos ahora pequeña Ale Cuatro Horas que tan grave puede llegar a ser ese distanciamiento recordando una anécdota de la mafia en los años veintes del siglo pasado. Cuentan de la última entrevista que hicieron a un gángster antes de que fuera ejecutado: ¿Qué se siente matar a un hombre? le preguntaron. “Miren, contestó a la prensa, el primero espantoso, el segundo horrible, pero ya para el octavo o noveno ya no importa”. Como verás podemos asesinar a nuestra conciencia. Podemos llegar a apartar a Dios de nuestras vidas hasta extremos que no quisiéramos imaginar. Para evitar esa debacle en la que el Pecado Original hundió a la humanidad vino Jesucristo, el Hijo siempre obediente a la voluntad del Padre. ¡Estudiémosle!

Lo primero que constatamos del camino de perdición es la debilidad que arrastra nuestro juicio hacia los vicios pervirtiéndonos. Es la debilidad nacida del Pecado Original, la mentira aceptada por los primeros padres Adán y Eva. Mentira que se repite continuamente en nuestras vidas en la pluralidad de bienes como de sectas capaces de atraparnos. Jesucristo N.S. por el contrario jamás permitió que los bienes lo frenaran.

¿Qué puede haber de mayor atractivo para un hombre que la mujer? La respuesta del Señor: ¡A volar con noviazgos y matrimonio! ¿Por qué? ¿Porque fueran un mal? ¡Por supuesto que no! Porque son un gran bien, pero no el Bien Sumo. Son los bienes los que nos atrapan por la voluntad, los males no tienen ese poder.

¿Es el dinero un mal? ¡Por supuesto que no, y de ahí la trampa! ¿Entonces? La bolsa para el ratero: ¡Que Judas sea el tesorero!

¿Es el poder un mal? ¡Por supuesto que no, he ahí la trampa! Quieren proclamarle rey. ¿Qué hace? Huye de ellos.

Le quedaba su enorme prestigio, su indiscutible atracción para las multitudes, la fama que ha esclavizado a tantos. ¿Qué hace? Elige la muerte más afrentosa y el mayor ridículo público.

Si, ya sólo le quedaba un mínimo de bienestar físico. Elige la pasión más dolorosa.

Quedándole sólo la vida acepta la muerte, y no pudiendo esclavizarlo bien alguno ni en alguna forma retenerlo, tampoco pudo la muerte. ¡Y al tercer día resucitó!

Como verás pequeña Ale Cuatro Horas, el alma humana de N.S. Jesucristo jamás tuvo un juez venal capaz de apartarlo ni por un instante de la voluntad de su conciencia que en todos nosotros es la presencia del eterno Padre. Borrando las seducciones del mundo de su alma salvó al mundo. Su conducta bastó para compensar por la nuestra, porque el pecado no se comete en un vacío, sino en Dios, porque Dios lo es todo. Para que quede más claro en la Sagrada Escritura lo encontramos en el discurso de san Pablo en el Areópago: “...pues en él vivimos, nos movemos y existimos” (Hechos 17:28). Resumiendo: Es solo la magna presencia omnipotente de Jesucristo a la vez Dios y hombre, en cada uno de los actos de su voluntad, en cada uno de sus pensamientos y de los afectos de su Sagrado Corazón que puede imponer su sola perfección a todos los pecados del mundo para un resultado de infinita perfección final.

Como hemos visto, y en consideración a que es el placer, o nuestra negación al dolor y cualquier forma de sacrificio lo que nos abate, que se requirió del supremo sacrificio del Calvario con su dolor inenarrable. Tanto placer vicioso requeriría un correctivo de dolor ya que solo un opuesto compensa al otro. Pero en todos los órdenes, tanto el físico como el moral y espiritual ni todos los hombres juntos con nuestros sufrimientos, sobre todo por su carencia de intención, estábamos en condiciones de reparar absolutamente nada.

Este hecho lo dejó en claro Jesucristo N.S. en uno de sus comunicados a Concepción Cabrera de Armida cuando le dijo: “Todo un Jesús, tan perfecto como lo conocen, de no haber sido Dios no habría servido para nada a los fines de la redención”. Es muy obvio que la redención del género humano sólo podía operar en realidad y justicia en un ser humano que a la vez fuera Dios. Esto por las muy obvias limitaciones del hombre para regenerarse solo y a sí mismo, con mucha mayor razón para que un mero hombre pudiera, ni en el paroxismo del dolor más inimaginable, regenerar a todo el género humano.

Pero aún así, pequeña Ale Cuatro Horas, es obvio que cada ser humano tiene en alguna forma que participar de la redención uniéndose a Jesucristo. Y es obvio también que, siendo nuestra carne tan propensa a los vicios la más afectada, tuviera que ser sanada por la carne triunfante de Cristo, de ahí la Eucaristía. De ahí su mandato y su exigencia: “Jesús les dijo: «En verdad, en verdad os digo: si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros” (Juan 6:53).

Como te debe quedar claro a estas alturas pequeña, la redención no se refiere sólo a un acto reparador como lo fue el Calvario. El acto reparador quedaría inconcluso si sus efectos no llegaran a nosotros tan físicamente como el pecado es físico, éstos nos llegan físicamente por medio de los sacramentos.

Para ejemplificarte considera a ese hombre que después de haber estudiado muchísimos años y haber acumulado muy valiosa experiencia se vio asaltado por la inquietud de no poder legar a sus hijos su competencia personal y el acerbo de su cultura. Pensando mucho y meditando se le ocurrió que si pudiera dar de comer su cerebro a sus hijos con una técnica adecuada para que sus experiencias y acervo cultural pudiera ser asimilados debidamente por sus hijos habría resuelto su problema. Por supuesto esto es locura, es un imposible, lo es para los hombres, pero afortunadamente no lo es para Dios.

Y en la Eucaristía podemos recibir mucho más, infinitamente más de lo que ese padre se proponía. Recibimos de hecho tanto como nuestra fe permite. Los límites no están en la Eucaristía, sino como siempre en nuestra fe. Ahora comprenderás mucho mejor pequeña Ale Cuatro Horas lo cierto de mi aseveración sobre las sectas y demás errores que nos limitan de la misma manera que tu cocinera quitando ingredientes y calidad a los platillos.

Con el cariño de siempre...


SÉPTIMO DIÁLOGO CON LA PEQUEÑA ALE CUATRO HORAS


¿Qué te pareció mi última carta Cuatro Horas?

---Supongo que seguirás con que todo es muy obvio, pero ya te dije que lo será para ti que estás viejísimo y te la has pasado pensando en estas cosas. A mi me parece sorprendente que tengamos --¿o debo decir que seamos?-- tres personas en una.

---En una no, Cuatro Horas. Eso sería terriblemente contradictorio. No es cuestión de echar a perder la aritmética, ni de introducir hasta un impedimento para aprender a contar. Tres no es uno.

---¿Entonces?

---En cada INDIVIDUO.

---Pero si tu mismo me has dicho que el animal no es persona por carecer de personas.

---Me disculpo Cuatro Horas, es verdad. La fuerza de la costumbre. Pero en ese párrafo que aquí corrijo queda asentada la limitación de las palabras, y como pueden volverse un obstáculo a la comprensión. La confusión es clara sin duda, pero tiene una justificación. Si te fijas bien en el párrafo que ahora transcribo de mi última carta bajo el rubro “Cuando nos dirigimos a Perez”: Cuando nos dirigimos a un tercero lo hacemos con decisión, en general como si no hubiera conflicto dentro de nosotros. Así, cuando hay recta intención nos dirigimos a Pérez padre al pedirle consejo. A Pérez hijo cuando solicitamos de su buen juicio la aprobación; y, al espíritu de Pérez cuando solicitamos su ayuda. Y viceversa cuando 'Pérez' se dirige a nosotros. Nos dirigimos a Pérez padre cuando hablamos a nombre de la ley y del bien común en forma general, como refuerzo. A Pérez hijo cuando aprobamos o desaprobamos sus ideas; y al espíritu, afectos o voluntad de Pérez cuando le ayudamos colaborando con él, o cuando de plano le rechazamos. Por supuesto que no somos muy conscientes de todo esto cuando actuamos. Pudiera parecer hasta superfluo; ya que después de todo, Pérez es un individuo. Para todos los efectos, Pérez sigue siendo Pérez, ...aparentemente. ¿Ves ahora en donde está la justificación?

---A ver si te entiendo... Cuando nos dirigimos a alguien nos dirigimos a tan solo una de sus tres personas y no a todas a la vez. ¿Pero que pasa no cuando nos dirigimos a, sino cuando pensamos en, una persona?

---La persona dominante es la que actúa, la tercera persona, su voluntad, sus actos: “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?(Mateo 7:16). Pero basta con que nos haga una trastada y ya le estamos reclamando, cuando lo correcto sería dirigirnos a su conciencia. ¿Ves ahora lo práctico del asunto? Lo que es más, si se trata de una persona de fe, tendremos más éxito recordándole el Evangelio y la ley. Si se trata de un funcionario público con sólo la ley pudiera bastar. Pero en todos los casos la conciencia padre es la ley, y el Evangelio es su jurisprudencia y su praxis.

---Ya te entendí, aunque para mi Pérez siga siendo, tan sólo, Pérez.

---Pero ahora lo tienes más completo y analizado. Y como podrás ver en relación con el Pecado Original, toda la debilidad humana está en la persona del juez vuelto juez venal, ya que la voluntad tiende siempre hacia el bien, pero la voluntad sólo puede discernir entre el bien y el mal por medio de un juez tarado por el Pecado Original. Adán y Eva juzgaron a favor del Maligno contra Dios, fue un pecado de juicio. De ahí que sea la Segunda Persona de la Santísima Trinidad --el Eterno Juez, la inteligencia del Padre, el Poder Judicial Omnipotente del único Dios-- la que se Encarnó para reconstruir al hombre. Y, consciente del daño sufrido por nuestras mentes, lo fundó todo; no en la lógica, sino en el amor; y volviendo al Padre nos envió al Espíritu Santo. En católico: Todo problema del hombre proviene de la voluntad del hombre torcida por el juez venal al que le quedó tan poca racionalidad que sólo puede ser sobreseído por el amor. Cuando el hombre acepta que sólo el amor cuenta, rechazando para siempre el rencor, el odio y la venganza, entonces va camino de su salvación temporal y eterna; y su familia y su patria con él. Este es el sentido pleno del Evangelio. Ya lo decía Pascal, el corazón tiene razones que la razón desconoce. Si el corazón tiene razones, pequeña Ale Cuatro Horas, entonces ya no estamos hablando de un mero órgano, de una bomba de sangre. Estamos hablando de una persona, y de sus razones. Estamos de regreso a lo que te decía arriba, el Espíritu Santo Amor, tercera Persona de la Santísima Trinidad tiene su reflejo en el corazón del hombre.

---Para mi el corazón sigue siendo sólo una bomba de sangre, es la que la bombea.

---Y cuando les decías a tus novios “te entrego mi corazón” ¿dejaba de bombear tu sangre y te ibas a parar cada vez al panteón, Cuatro Horas?

---Deja de hacerte el chistoso. Se los decía como bombología...

---¡Cual bombología? Analogía, Cuatro Horas, analogía. Pues es precisamente por analogía como se identifica el amor con el corazón. Por analogía es: Por la semejanza entre cosas distintas.

---Y entonces, ¿qué es la bombología?

---Creo que es algo que tu acabas de inventar, Cuatro Horas, pudiendo ser el tratado del bombo.

---¿Y que es el bombo?

---El tambor mayor, pero también por analogía es un elogio exagerado: “Con mucho bombo”, y familiarmente se dice también “Con bombo y platillo” al referirse al exceso de propaganda y de alabanzas exageradas, y a la víctima del bombo un atolondrado...

--- Y ¿qué es un atolondrado?

---Cuatro Horas...

---¿Qué?

---Cómprate un diccionario, Cuatro Horas...

---¡Lo pensaré!